Márquez olvida a sus rivales

Barcelona/ Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) afrontó la primera jornada de entrenamientos libres para el Gran Premio de Cataluña de MotoGP tras dejar al margen a todos sus rivales para centrar el trabajo en lograr una buena puesta a punto para una carrera de las consideradas "importantes" para marcar las diferencias.

Las claves de esta primera jornada se vieron rápido, pues ya en los primeros libres el líder del Mundial cambió su estrategia de entrenamientos, al salir a rodar prácticamente en las mismas condiciones que sus rivales, con neumático blando delante y compuesto intermedio detrás, pero en los últimos minutos cambió el trasero y puso blando con el claro objetivo de conseguir un buen tiempo.

Aunque ese tiempo no fue excesivamente brillante sí que le permitió marcharse a comer al frente de la tabla para, en la segunda sesión, que se disputa más o menos a la misma hora que la carrera del domingo, centrar todo su trabajo en conseguir un buen ritmo de carrera.

Inicialmente Márquez rodó con los compuestos más blandos tanto delante como detrás y sólo en su tercer y última salida montó el neumático duro delante e intermedio detrás, que fue cuando protagonizó su mejor tiempo de 1:40.963, probablemente el segundo en el que estará el ritmo de carrera de un Márquez que apunta alto.

Y mientras el piloto de Repsol Honda se olvidó por completo de sus rivales, éstos aprovecharon la ocasión para "saltar a la palestra" y si bien Andrea Dovizioso pareció ser el líder de la jornada con su Ducati Desmosedici GP19, vencedora el año pasado en manos de Jorge Lorenzo en este escenario, al final sorprendió nuevamente Fabio Quartararo (Yamaha YZR M 1), que hizo toda la sesión con neumáticos intermedios para cambiar a blando en ambos ejes en su última salida, en la que claramente iba en busca de un buen tiempo.

El italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1) llegó escarmentado de su aciago y casi nefasto fin de semana en Mugello (Italia) y aunque no pudo estar entre los más rápidos de la categoría, la séptima posición le permite albergar posibilidades de salir algo más adelante en el trazado de Montmeló.

En el polo opuesto se encuentra Jorge Lorenzo (Repsol Honda RC 213 V), a quien no le ha servido de mucho, por ahora, su viaje a Japón para buscar soluciones.

Los apéndices que lució el depósito de su moto en la parte posterior superior, para poder sujetar mejor las piernas en las frenadas y tumbadas, no han supuesto un cambio radical de rendimiento y el campeón de Palma de Mallorca al final se tuvo que conformar con la decimocuarta plaza, mejor que Maverick Viñales y su Yamaha, que acabó detrás.

En Moto2, Thomas Luthi (Kalex) y Alex Márquez (Estrella Galicia 0'0 Kalex) validan sus tiempos matinales y marcan las referencias a sus rivales en su particular pelea por el liderato del Mundial con el italiano Lorenzo Baldasarri (Kalex), un par de pasos por detrás de ellos (noveno).

Hasta cuatro pilotos españoles se encuentran entre los seis primeros en una carrera en la que saben que ellos deben ser los protagonistas.

Baldasarri mejora respecto a Mugello (Italia), pero aún sigue estando muy lejos de su mejor condición, lo que le puede representar un problema el día de la carrera.

En Moto3 Alonso López y Sergio García, pilotos del Estrella Galicia 0'0 sorprendieron en Montmeló al marcar las dos mejores vueltas en una jornada en la que el líder del Mundial, el también español Arón Canet (KTM) ha tenido mucho más problemas de los previstos para rodar al ritmo de los de cabeza y por ello acabó en una más que preocupante decimoctava plaza.