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Luis Enrique no se fía de una posible resurrección

El entrenador del Barcelona se mostró cauto ante la ventaja de su equipo en el Camp Nou.

Luis Enrique, durante el entrenamiento de ayer en la ciudad deportiva Joan Gamper.
Efe · Redacción Sevilla

17 de agosto 2016 - 05:02

El encuentro de ida dejó satisfecho a un Luis Enrique que, sin embargo, prefiere no abonarse a la euforia para transmitir a su plantilla un mensaje de cautela con vistas a la vuelta. "El partido de Sevilla me dejó muy buenas sensaciones. Estuvimos a un nivel altísimo", destacó el entrenador azulgrana.

El gijonés no se fía del Sevilla y se muestra precavido ante una posible remontada hispalense. "A pesar de tener un marcador difícil, el rival nos va a crear problemas, estoy seguro. Es un partido que se puede reabrir. Nosotros buscaremos que no se produzca ese hecho, golpeando al Sevilla primero", admitió.

El Barcelona saldrá con la intención de controlar el partido, a sabiendas de la importancia de evitar un gol de los andaluces que pueda abrir la eliminatoria.

Luis Enrique cuenta con la opción de realizar cambios en el once por el que apostó en Sevilla. Con la lesión de Mathieu y el desgaste de Gerard Piqué y Javier Mascherano en la ida, el técnico estudia la posibilidad de apostar por dar entrada a Samuel Umtiti en el eje de la defensa.

Sin embargo, el entrenador del Barcelona no quiso adelantar este extremo y prefirió entrar en generalizaciones: "Veo bien a Samuel y a todas las incorporaciones. Están cogiendo el tono físico y adaptándose a un nuevo modelo de juego y no es fácil rendir desde el inicio".

Con quien sí se deshizo en elogios fue con Sergi Roberto. Tras ocupar infinidad de demarcaciones, el canterano parece destinado a tomar el relevo de Daniel Alves en el lateral derecho. "Para adaptarse como él se necesita un compendio de todo. Es muy inteligente, tiene un gran nivel físico, un gran nivel técnico y un gran nivel táctico. Se nota que es mi ojito derecho", destacó.

En referencia a la hora del encuentro (23:00), la cual no beneficia a que el Camp Nou esté lleno, máxime cuando no habrá metro de vuelta a casa, Luis Enrique utilizó su habitual ironía para animar al aficionado culé. "Es verano, uno se puede ir a dormir tarde, luego llegar a casa y ver los Juegos... Estamos en una época en la que hay que ser hipersano, por lo que puedes ir en metro y volver andando, dejarte la garganta, si Dios quiere, animando y celebrando el título, y encima pierdes calorías", sentenció en tono de broma el asturiano.

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