Knicks-Lakers (117-126): Bryant y Pau Gasol se exhiben en Nueva York

Cuando se pensaba que los Lakers podían sentir la ausencia por lesión del pívot Andrew Bynum, que será baja tres meses, Bryant demostró, con 61 puntos, que el equipo tiene otras armas para suplir la baja de su hombre alto.

Bryant estableció la mejor marca de anotación individual conseguida en el actual Madison Square Garden IV para superar los 55 que habían logrado el ex base Michael Jordan y los 60 de Bernard King.

El escolta estrella de los Lakers, con tres tiros de personal, superó la marca de Jordan con 3:56 minutos por jugarse del partido que su equipo ganó para conseguir la tercera victoria consecutiva fuera de su campo.

Después de haber conseguido superar a Jordan, Bryant también desde la línea de personal y 2:33 minutos por disputarse anotó para dejar a King sin el récord.

Ante esta gran exhibición encestadora de Bryant, los espectadores que llenaron las gradas del Madison Square, puestos de pie, le dedicaron cánticos de "MVP, MVP...", algo que no pueden hacer con ninguno de los jugadores que forman actualmente la plantilla de los Knicks.

La marca de Bryant también fue la mayor anotación individual que se consigue en la NBA en lo que va de competición y el partido número 24 de su carrera que logra 50 o más puntos, mientras que fue el quinto encuentro de su carrera disputado en el Madison Square Garden que supera la marca de los 40 tantos.

No vitorearon de la misma manera a Gasol, pero el jugador de Sant Boi, que volvió a la posición de pívot para ocupar el puesto dejado vacante por Bynum, quiso demostrar que también está a la altura de las estrellas de la NBA y aportó su decimosexto doble-doble después de conseguir 31 puntos y 14 rebotes.

Gasol jugó 41 minutos, el que más tiempo estuvo en el campo, para exhibirse con un gran toque de muñeca que le permitió anotar 12 de 17 tiros de campo, mejor porcentaje que Bryant (19-31), y 7-8 desde la línea de personal, dio cinco asistencias y puso dos tapones.

El trabajo de Gasol fue alabado por el entrenador de los Lakers, Phil Jackson, no sólo por el rendimiento, sino por haberse acostumbrado de inmediato en el la posición de número cinco.

El escolta reserva Trevor Ariza aportó 13 puntos para ser el tercer jugador de los Lakers que anotaron en doble figura y como equipo consiguieron un 52,4 por ciento de acierto en los tiros de campo.

El alero Lamar Odom, que ocupó el puesto de Gasol como número cuatro en la alineación titular de los Lakers, hizo también una gran labor bajo los aros después de capturar 14 rebotes, puso tres tapones y dio cuatro asistencias.

Los Lakers (38-9), que tienen la segunda mejor marca de la liga, con Gasol y Odom dominaron el juego bajo los aros para conseguir 52 rebotes por 41 de los Knicks.

El alero Al Harringon anotó 24 puntos para encabezar una lista de seis jugadores que anotaron en doble dígitos, pero su equipo nunca pudo establecerse en la defensa y mucho menos controlar la inspiración de Bryant y Gasol.

El pívot David Lee con 22 puntos y 12 rebotes volvió a ser el mejor hombre alto para los Knicks (21-26), pero no pudo evitar la derrota de su equipo, que cortó una racha de tres triunfos consecutivos.

El alero Wilson Chandler aportó 20 puntos para los Knicks, que han ganado seis de los últimos siete partidos, pero con el entrenador Mike D'Antoni ya están viviendo la misma historia que lo hicieron antes los Suns de Phoenix, el equipo juega buen ataque, pero falla en defensa.

Ficha técnica:

117 - New York Knicks (26+28+32+31): Duhon (8), Richardson (2), Lee (22), Jared Jeffries (8), Harrington (24) -cinco inicial-, Chandler (20), Robinson (13), Gallinari (10) y Thomas (10).

126 - Los Ángeles Lakers (31+34+31+30): Fisher (3), Bryant (61), Gasol (31), Walton (6) y Odom (6) -cinco inicial-, Ariza (13), Radmanovic (-), Farmar (6), Vujacic (-), Powell (-) y Yue (-).

Árbitros: Mark Ayotte, David Jones y Bob Delaney. No pitaron faltas técnicas ni hubo eliminados por personales.

Incidencias: Partido de la temporada regular del baloncesto profesional de la NBA, que se disputó en el Madison Square Garden, de Nueva York, ante 19.763 espectadores.