Incógnitas sobre el consejo

El nuevo consejo de administración del Sevilla presenta varias incógnitas antes de su definitiva conformación tras la Junta General de Accionistas del pasado martes. Lo único que se puede afirmar con rotundidad es que José Castro será confirmado como presidente, cargo que ahora ejerce en funciones, y que continuarán la mayoría de los consejeros, con más protagonismo para algunos como Juan Luis Villanueva, cuya exposición del informe de cuentas gustó mucho a los accionistas. También se puede afirmar que José María Cruz no regresará al Sevilla, ni como consejero ni como cargo ejecutivo. Según anunció en la tarde de ayer Marca.com, el ex vicepresidente y ex director general del club comunicó al presidente en funciones que ya ha tomado la decisión que venía meditando desde que José María del Nido le pidiera su regreso en la reunión que hubo en su casa con los pesos pesados del club el día que se conoció la sentencia condenatoria del Tribunal Supremo. Aquel día ya dijo Cruz que tenía que sopesar la decisión. No lo tenía claro y ya se ha determinado a no volver.

Se abre así un nuevo panorama que debe definirse en los próximos días, posiblemente la semana próxima. De entrada, el nuevo consejo debe cubrir la vacante que dejó Del Nido con su dimisión como presidente, producida el 9 de diciembre. Otra vacante que, se supone, debe cubrirse será la de Monchi. El director deportivo llegó a anunciar públicamente su "dimisión" en su última comparecencia pública, previa a la Junta de Accionistas del pasado martes 17. Sin embargo, al no haberse producido aún ninguna reunión oficial del nuevo consejo, esta renuncia al cargo aún no es oficial. Monchi, que sí continuará con su cargo ejecutivo, dejará otro puesto vacante en el nuevo consejo.

Lo que antes era un puesto a cubrir, el de Monchi, ahora son dos, tras el no de Cruz. Detrás de esta decisión podría estar la completa salida de Del Nido de la escena sevillista por su grave problema personal, incluso accionarialmente. El ex presidente debe afrontar un elevado pago (2,7 millones de euros) tras el auto dictado por la Audiencia de Málaga este jueves y es posible que incluso tenga que desprenderse de sus acciones, ya que, como aseguró y garantizó durante el discurso de su dimisión, satisfará hasta el último céntimo del dinero que se le reclama por la Justicia.

Este obligado paso al lado de Del Nido y los consecuentes cambios que puede haber en el reparto de poder en el seno de Sevillistas de Nervión pueden estar detrás de la decisión que finalmente ha adoptado Cruz, un hombre por el que siempre había apostado con fuerza el ex presidente hasta la salida del club del ex director general, por motivos personales y profesionales, según explicó, en 2012.

Castro, además, salió muy reforzado de la Junta de Accionistas. Gustó su discurso y está bien respaldado por el grupo que controla la mayoría de acciones, Sevillistas de Nervión. Pero, al margen de la fuerza que ha cobrado, quedan algunas incógnitas aún.