Gestión ideal de los esfuerzos

Si de un partido de pretemporada se pueden sacar pocas conclusiones, raro es ver un encuentro de competición con tan poca tensión. Como si de un Trofeo Antonio Puerta se tratara, el Sevilla firmó un encuentro que puede decirse que duró 18 minutos, los que tardó el equipo de Unai Emery en matar el suspense -si es que lo había- de si el Granada podía crearle problemas para pasar la eliminatoria.

Llegado el gol de Gameiro, la noche sirvió para que algunos jugadores aprovecharan la ocasión para mostrarse ante su entrenador y se pusieran en el escaparata para contar en algunos de los choques de vital importancia que los blancos tienen de aquí en adelante. Hombres como Deulofeu, Iago Aspas, Gameiro, Denis Suárez o Kolodziejczak mostraron cosas muy interesantes de las que seguro que el entrenador tomó buena nota para el futuro.

Defensa

El Granada no ofreció ninguna dificultad en ataque. Ni siquiera apretó arriba y renunció a buscarle las cosquillas a un equipo que se sintió siempre cómodo. Antes bien, el equipo de Caparrós se dedicó a esperar atrás aunque sin morder al estilo de los equipos del utrerano. Ante ello, la defensa se sintió cómoda, Kolodziejczak jugó a lo que mejor sabe, a abrirse un poquito a la izquierda y a jugar en largo dejando el pasillo a Fernando Navarro.

En el doble pivote volvió Krychowiak para ir activando la musculatura de las piernas para la Liga acompañado de un Coke que no desentonó en su segundo partido como medio centro.

Ataque

El Sevilla se posicionó en un dibujo un tanto asimétrico. Con Kolodziejczak de lateral falso y Fernando Navarro empujando a Denis Suárez hacia el centro. El gallego buscó el balón y atrajo mucho juego para que por la derecha aparecieran Deulofeu y los movimientos de Iago Aspas. El catalán fue el más eléctrico todo el partido, con ganas, explosividad y un gran golpeo, y el ex jugador del Liverpool otra vez genial abriendo espacios para un Gameiro que encontró la mejor atmósfera para su juego: metros, defensa pasiva y juego rápido.

Los cambios en la segunda parte no son suficientes para levantar el interés en un envite sin historia. El ritmo de juego sin tensión competitiva, aun siendo vertiginoso, no parece igual, y eso fue lo que pasó. Sólo Deulofeu puntualmente con entradas por la derecha puso algo de chispa a una segunda parte con el único interés de saber cuántos goles encajaría el equipo de Caparrós en su visita al Sánchez-Pizjuán.

Virtudes

Mandar desde el primer minuto y hasta el final. Ni siquiera la relajación por el resultado y que bajara el ritmo hicieron que el Sevilla perdiera el control de la situación en ningún momento. El objetivo de resolver pronto la eliminatoria y guardar fuerzas para el próximo choque liguero ante el Málaga se cumplió con creces.

Talón de Aquiles

Poco se podía exigir al equipo sevillista en una noche como la de ayer, en la que dio espectáculo sin pisar el acelerador. Quizá algo de ritmo más tras el 2-0, pero...

Uno por uno

Sergio Rico Sin trabajo. Seguro y concentrado.

Figueiras Se unió al ataque con decisión y no pasó ningún apuro en defensa.

Carriço Un partido cómodo, sin grandes desplazamientos.

Kolodziejczak No se sabe de qué acabará, pero tiene condiciones de jugadorazo. Rápido en el corte y con una zurda de oro en la salida del balón.

Fernando Navarro La tendencia de Kolodziejczak a pegarse a la banda le dio metros por delante. Subió y dio la asistencia del primer gol.

Deulofeu Muy enchufado y el que más gasolina gastó. Eléctrico siempre, su golpeo a balón parado otra vez fue clave.

Coke Repitió como medio centro y cumplió.

Krychowiak Se midió bien, pero el partido le sirvió para ir activando su musculatura.

Denis Suárez Buscó, como es habitual en él, el centro y atrajo al rival con sus conducciones.

Iago Aspas Otro gran partido, con movimientos para buscar espacios y un cabezazo que significó el segundo gol.

Gameiro Cómodo y certero.

Iborra Sobrado en el centro.

Bacca Todo estaba hecho.

Reyes Metió algún balón de los suyos por medio.