Gabriel Escobar queda a las puertas del bronce en peso mosca

Gabriel Escobar cayó este martes, en la categoría mosca (de 48 a 52 kilogramos), contra el kazajo Saken Bibossinov por decisión dividida (3-2) y se queda a las puertas del bronce en los Juegos Olímpicos y de acabar con la sequía para el equipo español tras 21 años sin medallas. Después de Tokio 2020, Rafa Lozano, actual seleccionador, se mantiene como el último medallista con la plata en Sídney 2000. También tiene en su palmarés el bronce de Atlanta 1996.

El tercer puesto de Enrique Rodríguez Cal en Múnich 72 y el segundo de Faustino Reyes en Barcelona 92 completan el medallero español de pugilismo. Así, Garbiel Escobar iguala el mejor resultado en los últimos años, los cuartos de final de Samuel Carmona en los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Rozó colgarse la medalla de bronce el español y alcanzar cotas mayores frente a Bibossinov. El púgil nacido en Leganés besó la lona en el primer asalto tras recibir un croché de derecha a la sien que le hizo que le temblaran las piernas, pero ni mucho menos lo sacó de la pelea. Volvió a mostrar sus recursos técnicos, actuando de diestro y de zurdo, y conectó en varias ocasiones sus golpes curvos por encima de los rectos del kazajo, que intentó aprovechar su envergadura.

El segundo asalto fue de Escobar. Al contragolpe dominó la pelea e impactó con claridad en el rostro de su rival. Pelea muy cerrada y ambas esquinas lo sabían, por lo que pidieron a sus boxeadores darlo todo en el último. Eso sí, Bibossinov empujó dos veces al español para cortar el ritmo cuando se le metía en la corta distancia, sin sanción.

Empezó mejor el púgil español, pero eso le hizo no acabar tan arriba como esperaba y, quizá, costarle la pelea. Tres 29-28 para Bibossinov le dieron el pase a semifinales y asegurar el bronce a un boxeador que llegó a Tokio 2020 con la vitola de ser medallista en el último Mundial.

Escobar era el último boxeador del equipo español en los Juegos de Tokio.