Emery: "Trabajo como si fuera a quedarme aquí toda la vida"

El entrenador del Sevilla, Unai Emery, se felicitó este miércoles por el hecho de "mantener los objetivos en las dos competiciones a estas alturas" de la temporada, algo que calificó que "bonito de vivir", e hizo votos por "mantener el acierto en los dos partidos", ante el Málaga y el Dnipro ucraniano. En la jornada de puertas abiertas organizada para la UEFA ante la la final de la Liga Europa del día 27 en Varsovia, el preparador sevillista desveló que, a pesar de que el último choque liguero en Málaga es antes -este sábado-, "ya hay gente" de su cuerpo técnico "viendo al Dnipro", rival del Sevilla en dicha final continental. Además, precisó que también llega "información de Juande Ramos y Marcos Álvarez", antiguos entrenador y preparador físico tanto del Sevilla como del conjunto ucraniano.

Emery admitió que el extremo internacional ucraniano Yevhen "Konoplyanka es un jugador conocido desde hace tiempo", al que quiso fichar en sus "tiempos en el Spartak" de Moscú, e indicó que el actual delegado y ex miembro de la secretaría técnica del Sevilla, Juan Martagón, le dijo "el otro día que le gustaba" cuando estaba en ese último cargo. El técnico guipuzcoano rehusó decir nada sobre "quién va a jugar el miércoles" la final por considerarlo "prematuro y, además, pueden pasar muchas cosas" en una semana en la que pretende "respirar competición de alto nivel", porque aunque "pueda haber euforia fuera, dentro lo único que hay es concentración en el trabajo".

Reconoció que el Sevilla tiene en la final ante el Dnipro la ventaja de "la experiencia, que es un aprendizaje precioso", ya que le ha permitido "alcanzar la madurez" en una "'Europa League muy intensa" y en la que, precisó, ya ha "jugado cuatro finales: ante el Borussia Mönchengladbach, el Villarreal, el Zenit y la Fiorentina", en alusión a los rivales que han tenido desde los dieciseisavos de final. Emery considera que la Liga Europa es "una competición de todos los sevillistas" y achacó "el título del año pasado" a "haberla vivido desde el principio, desde la ronda previa del 1 de agosto. Nadie la vive como la viven los sevillistas", recalcó, "aunque eso no quita" que su deseo ahora sea "alcanzar la Champions". El entrenador vasco aseguró que "el grupo ha acogido de buen grado la concentración en Marbella previa a la final" y declinó referirse a su futuro porque trabaja como si se "fuera a quedar toda la vida en el Sevilla", sin "otro objetivo que los partidos de Málaga y Varsovia".