Con Castro se abre la veda

La llegada del presidente debe servir para liquidar temas casi listos. El adiós de Emery y la llegada de Sampaoli, primeros asuntos candentes.

El presidente sevillista, José Castro, abraza a Diego Martínez, técnico del filial tras consumarse el ascenso.
El presidente sevillista, José Castro, abraza a Diego Martínez, técnico del filial tras consumarse el ascenso.
Víctor Navarro, Sevilla

27 de junio 2016 - 05:02

Aunque su figura no es capital en la fase de negociación, la vuelta de José Castro, de viaje por asuntos de negocios, debe servir para dar oficialidad a algunos de los temas que el Sevilla tiene sobre la mesa, puesto que su firma, así como la del vicepresidente, son fundamentales desde el punto de vista burocrático para dar carpetazo a cualquier acuerdo.

El regreso del presidente, que llegó en la mañana de ayer para vivir en primera persona el ascenso a la Segunda División del filial, debe servir por tanto para cerrar algunas de las operaciones que están prácticamente hechas, como la salida de Unai Emery con destino al PSG o la llegada del argentino Jorge Sampaoli como sustituto del vasco en el banquillo del Sánchez-Pizjuán.

Porque con el mandamás al frente, el Sevilla entra en una de las determinadas como semanas claves. Sin entrenador a la vista, al menos de forma oficial, el plantel, en apenas 15 días, afronta la vuelta a los entrenamientos para preparar la próxima temporada. Y todavía hay algunos asuntos candentes a los que dar el definitivo empujón.

Más allá de las ya mencionadas cuestiones del banquillo, se espera que el PSG vuelva a la carga por Krychowiak en las próximas fechas. El relevante papel que toma con su selección en la Eurocopa no hace sino meter más prisa a los franceses, que pretenden cerrar cuanto antes el acuerdo por el poderoso medio polaco, con el que se acordó que no se pondría demasiadas trabas a su salida si el que ofertaba era un equipo grande.

Su marcha, no obstante, está algo más que asumida, aunque en el Sevilla no tienen prisa por cerrar el trato y sí de tratar de exprimir lo máximo posible la cartera de Nasser Al-Khelaifi, dueño del club parisino.

Mientras tanto, se continúa trabajando en otras cuestiones relativas a la confección de la plantilla, con la idea principal de encontrar un sustituto de garantías. Es ahí donde aparece el nombre de Diawará, el favorito. Sin embargo, la aparición de la Roma puede entorpecer la negociación.

A la par, se continúa trabajando en la llegada de otros futbolistas, como Ben Arfa, quien está muy cerca de firmar con los sevillistas, o Roque Mesa. En el caso del de Telde, según apuntan en Canarias7, el aún jugador del Las Palmas está dispuesto incluso a añadir parte de dinero de su bolsillo para aumentar la cantidad ofertada en primera instancia por el Sevilla, una cantidad cercana a los cinco millones. El futbolista sabe que éste es un tren que no se le puede escapar a sus 27 años.

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