Bachelet y Bielsa vuelven a cruzar sus miradas en Sudáfrica

MB y MB se reencontraron ayer de nuevo en Sudáfrica. Marcelo Bielsa recibió a la ex presidenta de Chile, Michelle Bachelet, en la concentración de la selección del país en el Mundial, donde podrán continuar la relación de mutua admiración que se profesan.

La habitación en la que se hospedará Bachelet durante toda la primera fase del Mundial, en el Ingwenyama Lodge, está reservada hace meses. Junto a la ex mandataria, compartirá espacio también con el equipo el tenista Fernando González, medallista olímpico en Atenas 2004 y Pekín 2008. La ex mandataria, a diferencia de algunos dirigentes, no tendrá ninguna restricción en el trato con los jugadores. La simpatía entre Bachelet y Bielsa, con halagos mutuos, viene de lejos. El primero en avivar el fuego fue Bielsa, que reveló que usaba la imagen de Bachelet en sus prácticas: "A los jugadores siempre les he dicho que yo quiero ser a ellos lo que es Bachelet para Chile". Bachelet, separada de dos matrimonios, no dudó en devolver el halago antes de su salida del poder, cuando ella y Bielsa eran de los personajes más queridos de los chilenos: "Bielsa es un tipo interesante, esa combinación fatal para las mujeres, entre guapo y misterioso".

Desde Argentina, Maradona apuntó: "¿Qué le pasa a Bachelet? ¿Le gusta Bielsa?". La hermana del técnico, María Eugenia Bielsa, fue más allá y la criticó. "Me parece bien que haga un elogio a mi hermano, pero no como hombre", afirmó antes de calificar de "desubicadas" las palabras de la ya ex presidenta. La relación entre Bielsa y Bachelet está marcada por afinidades comunes.

A ambos les gusta el secreto, que nada se filtre. Bielsa, por sus problemas con la prensa; Bachelet, por su pasado clandestino. Ahora, ambos vuelven a encontrarse, rompiendo así todas las reglas del técnico argentino, que se permite la visita de una amiga mientras a sus jugadores los tiene enclaustrados sin Twitter, Facebook ni sexo.