Argentina da un puñetazo en la mesa

A este Mundial le faltaba algo. Ya había una selección que había llamado la atención con su juego –Alemania, con su exhibición ante Australia– y a pesar de los dos goles de Forlán a Sudáfrica se seguía echando en falta a un goleador: ya no. Argentina arrolló a Corea del Sur con un hat-trick de Higuaín que refuerza claramente a Maradona.

Las dudas en torno al seleccionador argentino habían derivado en un estúpido cruce de declaraciones con Pelé, totalmente inadecuado para un Mundial. Maradona cuestionado, ¡herejía!, por la elaboración de su elenco y por la disposición de los jugadores. En Sudáfrica, el vergel ofensivo con el que cuenta le permite ganar crédito. Ni siquiera la lesión de Samuel y la frivolidad de Demichelis restan valor al 4-1 argentino. Acaso, tapan los escasísimos defectos detectados por los asiáticos, muy físicos y muy ordenados pero que también supieron buscarle las cosquillas a un equipo varios escalones por encima.

Argentina tomó el mando con total nitidez y además se encontró con un inesperado regalo al cuarto de hora en forma de gol en propia puerta de Park Chu Young. La parte más difícil, hecha. Por delante en el marcador, la albiceleste evitó la reacción coreana manteniendo el balón. Con Tévez y Messi, la pelota siempre habitaba en campo asiático. Faltaba por ver si, como ante Nigeria, la superioridad traería goles o no, y si el marcador permanecería abierto o no. Higuaín, pasada le media hora, logró de cabeza el 2-0 desplumando a Corea, demasiado reservona.

El segundo gol argentino obligó a los asiáticos a intentar algo para no ser aniquilados y Argentina se encontró con una buena oportunidad para comprobar dónde debe mejorar. Corea encontró la forma de combinar fuera del alcance de los laterales y de las ayudas de Mascherano y Maxi –sustituto del lesionado Verón– y la lesión de Samuel empezó a adquirir su importancia real: Al filo del descanso, una estupidez de Demichelis permitió que Lee Chung Yong encarase a Romero para abrir un nuevo encuentro en el segundo tiempo.

Argentina reculó y Corea tuvo el empate a su alcance antes de la hora de juego. Ki-hon se plantó sólo ante Romero desde la derecha, pero se empeñó en tirar con la izquierda y con el exterior, mandando al lateral de la red la gran ocasión de ver un partido totalmente nuevo.

Pasado el susto, Argentina dijo basta. Tévez, cansado, dejó su sitio a Agüero y la defensa coreana se descompuso. Con toda la defensa pendiente de Messi, Higuaín acabó recibiendo dos balones absolutamente solo. En el primero, el del 3-1, le llegó el balón tras golpear en el palo y estando en claro fuera de juego; en el segundo, 4-1 y hat-trick, casi se vio obligado a marcar ante la estampida general de la defensa para frenar a Messi.

Con el primer gran delantero del Mundial, Maradona acalla a quienes, muchos, pedían la inclusión de Milito. Argentina pone un pie y medio en octavos, como primera de su grupo, y lanza un serio aviso al resto sobre lo que es capaz de hacer. Encima, recibe con sordina, la propia de un resultado que supone puñetazo en la mesa, los avisos necesarios de sus carencias defensivas. Qué más pedir.

4 - Argentina: Romero; Jonás Gutiérrez, Demichelis, Samuel (Burdisso, 23'), Heinze; Mascherano, Maxi Rodríguez, Di María; Messi, Tévez (Agüero, 75') e Higuaín (Bolatti, 83').

1 - Corea del Sur: Jung Sung-ryong; Oh Beom Seok, Cho Yong Hyung, Lee Jung Soo, Lee Young Pyo; Ki Sung Yueng (Kim Nam Il, 46'), Kim Jung Woo; Lee Chung Yong, Park Ji Sung, Yeom Ki Hun; Park Chu Young (Lee Dong Gook, 81').

Goles: 1-0 (17') Park Chu Young en propia puerta tras una falta sacada por Messi. 2-0 (33') Higuaín de cabeza. 2-1 (45') Lee Chung Yong. 3-1 (76') Higuaín, en fuera de juego, empuja un balón que Messí envió al palo. 4-1 (80') Higuaín.

Árbitro: Frank de Bleeckere (belga), amonestó a los surcoreanos Yeom Ki Hun y Lee Chung Yong y a los argentinos Jonás Gutiérrez, Javier Mascherano y Gabriel Heinze.

Incidencias: Partido de la primera fase del Mundial de Sudáfrica disputado en el Soccer City de Johannesburgo ante 82.174 espectadores.