Ventajas y desventajas de las cafeteras portátiles, según la OCU
Existen fundamentalmente modelos manuales y otros con batería recargable
La OCU aconseja adelantarse al Black Friday: “Esta es la mejor manera de asegurarse de que el descuento sea real”
Para los cafeteros, ¿hay algo mejor que el café de bar? Ahora es posible llevar su aroma y sabor a cualquier parte. Hace un tiempo llegaron al mercado las cafeteras portátiles, una vuelta de tuerca a los viejos termos que permite deleitarse con un café recién hecho donde quiera que estés, ya sea en el trabajo o de escapada por la naturaleza. A diferencia de las cafeteras de barista, estos aparatos funcionan sin necesidad de enchufe o del gas que requieren las cafeteras italianas. Puede que con tan solo estas líneas, se te antoja adquirir una este Black Friday, pero ¿realmente son prácticas?
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) analiza en un comunicado las ventajas y desventajas de las cafeteras portátiles. Estos aparatos funcionan tanto con café molido, como con café de cápsulas, aunque está claro que su producto no está a la altura, por ejemplo, de una cafetera exprés.
Con un precio entre 25 y 120 euros, la entidad se pregunta si merece la pena pagar por estas cafeteras portátiles y, para ello, ha comparado los siguientes modelos:
CONQUECO cafetera portátil automática
Este modelo que funciona con cápsulas cuenta con una batería recargable, que debe conectarse a la corriente durante unas dos horas y media antes de usarse fuera de casa. A continuación, se rellena el tanque con agua fría o caliente el tanque de agua situado en la parte superior, con capacidad para 50 mililitros. Después de presionar el botón frontal, la cafetera calienta el agua hasta alcanzar 90ºC y el café comienza a salir al cabo de 10 minutos. Para evitar esta demora, se recomienda usar agua calentada previamente.
A pesar de su facilidad de uso y su capacidad para calentar el agua, la OCU concluye que el café tarda bastante en salir para tan poca cantidad. Además, no es compatible con ciertas marcas de cápsulas, pesa casi un kilo y es bastante cara: su precio ronda los 130€.
KOOMA Cafetera portátil
La KOOMA ni lleva batería ni se conecta a la red eléctrica, sino que incorpora una bomba manual. Además, es apta tanto para café molido como para cápsulas. Se debe seleccionar uno de los sistemas, rellenar el depósito de agua y accionar la bomba vertical para obtener el café que cae por un depósito de cristal.
El principal inconveniente de esta cafetera portátil es que no calienta el café, por lo que requerería calentar el agua previamente con un hornillo o camping gas. Por otra parte, es bastante ligera, versátil y fácil de usar y limpiar.
WACACO NANOPRESSO Cafetera portátil manual
Al igual que el modelo anterior, esta cafetera portátil admite tanto cápsula como café molido, pero tampoco calienta el agua. Lo más destacado es la amplia capacidad de su depósito, en el que caben hasta 80 mililitros. Solo tienes que verter el agua y empezar a bombear mediante el pulsador que tiene en el centro.
Se trata del modelo más ergonómico y ligero de la lista (336 gramos), ideal para transportar a cualquier sitio. Sin embargo, cuando la usas deberás cerciorarte de "apuntar" bien para que todo el café caiga dentro de la taza y no derramar ni una gota.
Con todo lo anterior, la OCU concluye que se trata una solución poco práctica para las salidas cortas, en las que un termo puede cumplir perfectamente su función de mantener el café caliente. No obstante, puede ser un complemento interesante para el camping gas o el hornillo si hablamos de excursiones más largas.
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