Esta es la medida de aislamiento para casa barata y rápida que te ahorrará hasta un 30% en la factura de la luz

La llegada del frío puede hacer que nos planteemos la necesidad de aislar térmicamente nuestra vivienda. Existe una gran variedad de materiales naturales y artificiales que evitan el traspaso de la energía calorífica y, por tanto, nos ayudarán a reducir el consumo de calefacción en invierno y aire acondicionado en verano a medio plazo. Proporcionar un buen aislamiento a nuestra fachada es por tanto una inversión que contribuye al ahorro en la factura de la luz, pero ¿cuál es la alternativa más rápida y económica?

El aislamiento insuflado consiste en introducir un material aislante en las avidades de las paredes, techos o suelos para revestir las cámaras de aire. Su aplicación no requiere demoler ningún elemento existente ni tampoco agradar los cerramientos. Por tanto, la principal ventaja del insuflado es que se puede llevar a cabo sin la necesidad de hacer obra o a costa de la pérdida de espacio y superficie.

¿Qué es el aislamiento insuflado?

El proceso de insuflado implica realizar pequeños orificios, ya sea en paredes o techos, para inyectar el material aislante. Una vez dentro de las cavidades, el material se expande por sí solo y se compacta hasta conseguir llenar todos los huecos vacíos. Esta se antoja una solución sencilla para el revestimiento térmico de un piso antiguo, en los que la mayor parte de la cámara aislante es aire.

A veces esta es la única opción para rellenar los puentes térmicos de nuestra vivienda, es decir, los puntos conflictivos por los que se fuga el calor, como los cantos de los forjados o el cajón de las persianas. El insuflado también es recomendable a la hora de aislar zonas de difícil acceso, como áticos o paredes de muros antiguos donde la cámara de aire es muy gruesa.

Materiales y coste del aislamiento insuflado

Los materiales más comunes para aislar las cámaras de aire mediante insuflado son:

• La fibra de celulosa. Se trata de un material ecológico fabricado a partir de papel triturado con aditivos para hacerlo ignífugo.
• La espuma de poliuretano, que ofrece un alto nivel de aislamiento y se adapta a cualquier rincón o superficie irregular.
• El poliestireno expandido o EPS, una espuma plástica, absorbente y con baja conductividad, que se ha convertido en uno de los aislante más populares en la actualidad.

El precio del aislamiento insuflado varía en función del material, la superficie a cubrir o la región climática en la que se ubique tu vivienda. El coste por metro cuadrado oscila entre 10€ y 25€. No obstante, su instalación requiere mano de obra especializada que puede hacer incrementar la factura final.

Inconvenientes del aislamiento insuflado

No obstante, el aislamiento insuflado tiene también algunos inconvenientes. El principal es la dificultad para controlar la uniformidad del espesor. Los elementos estructurales, como tabiques y columnas, dificultan asimismo la expansión continua y uniforme de estos materiales. Además, su eficacia puede disminuir con el paso del tiempo si no se realiza un mantenimiento adecuado, sobre todo en estancias con una alta humedad o ventilación deficiente.