Cómo mantener la casa siempre caliente sin gastar mucha electricidad

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Cómo mantener la casa siempre caliente sin gastar mucha electricidad
Cómo mantener la casa siempre caliente sin gastar mucha electricidad
Raquel Narbona Valiente

16 de noviembre 2024 - 07:00

Sevilla/Ya llega el frío, y todos sabemos que eso, en gran parte, supone un aumento en el precio de la luz mensual, ya que consumimos más entre calefacción y demás. Este aumento en los precios de la electricidad y el gas supone que muchas personas busquen otras formas de mantener su hogar caliente sin depender demasiado de la calefacción. Hoy vamos a ver algunos trucos simples y económicos que podemos aplicar para mantener nuestras casas calentitas sin recurrir a la calefacción continua.

Cortinas gruesas

Durante el invierno, las ventanas y balcones son fuentes principales de pérdida de calor en la casa. Invertir en cortinas gruesas y opacas, preferentemente térmicas, es una excelente manera de retener el calor y bloquear las corrientes de aire frío. Además de proporcionar una capa aislante, este tipo de cortinas actúa como una barrera, reduciendo las fugas de calor. Si tienes cortinas más ligeras, puedes agregar una segunda capa de cortinas más pesadas para incrementar su efecto aislante.

Deja que el sol entre durante el día

Aprovechar la luz solar es uno de los métodos más antiguos y efectivos para calentar el hogar. Abre persianas y cortinas durante las horas en las que el sol ilumina directamente tu casa, generalmente entre las doce del mediodía y las cuatro de la tarde. Aunque los días de invierno suelen ser más cortos, dejar que el sol entre por las ventanas ayuda a subir la temperatura de las habitaciones de forma natural.

Cierra bien por la noche

Tan pronto como caiga la noche, asegúrate de cerrar todas las ventanas, persianas y cortinas para conservar el calor acumulado durante el día. Durante la noche, la temperatura exterior desciende considerablemente, y mantener las ventanas y puertas bien cerradas te ayudará a preservar el calor. Asimismo, cerrar las puertas interiores entre habitaciones evita que el calor se disperse y ayuda a mantener el calor en las estancias que más se usan.

Pon alfombras gruesas

El suelo frío es una de las mayores fuentes de incomodidad durante el invierno. Colocar alfombras gruesas en el suelo ayuda a aislar las habitaciones, dando una capa extra que mantiene el calor en el interior. Las alfombras, además de mantener los pies calientes, reducen la circulación de aire frío cerca del suelo.

Protege las ventanas con plástico retráctil o plástico de burbujas

Cubrir las ventanas con plástico retráctil o plástico de burbujas es una forma barata y útil de reducir la pérdida de calor. Estos materiales actúan como un aislante adicional que disminuye la transferencia de frío desde el exterior. Solo tienes que cortar el plástico al tamaño de las ventanas y asegurarlo con cinta adhesiva; el aire atrapado en las burbujas sirve como barrera térmica y es especialmente útil en ventanas más antiguas que puedan tener fugas de aire.

Sella rendijas y huecos con cinta aislante

Las pequeñas rendijas y grietas en puertas y ventanas pueden ser una vía de entrada para el frío. Coloca cinta aislante en los bordes de ventanas y puertas, especialmente si no están bien selladas, para ayudarte a evitar la entrada de aire frío. Es importante también sellar alrededor de tuberías, marcos de puertas, e incluso cajas de enchufes para evitar fugas de calor.

Aísla la chimenea cuando no vayas a usarla

Para quienes tienen la suerte de tener una chimenea, es crucial asegurarse de que esté cerrada cuando no esté en uso, ya que una chimenea abierta puede dejar entrar mucho aire frío. Hay aislantes específicos que se pueden colocar en el tiro de la chimenea, o incluso puedes usar una barrera temporal que bloqueé la entrada de aire frío mientras no esté encendida.

Usa velas para espacios pequeños

Las velas grandes y de buena calidad pueden elevar ligeramente la temperatura de espacios pequeños. Aunque no proporcionan una gran cantidad de calor, son una opción útil para añadir calidez en habitaciones pequeñas o en zonas donde se necesite un poco de calor adicional.

Burletes y rodapiés para puertas

Los burletes o rodapiés son accesorios que se colocan en la base de las puertas y que sellan cualquier espacio por el que pudiera entrar aire. Además de ser muy económicos, ayudan a bloquear el paso de corrientes de aire frío y a mantener el calor en la habitación

Usa un deshumidificador para reducir la humedad

La humedad puede hacer que las habitaciones se sientan más frías de lo que realmente son. Utilizar un deshumidificador ayuda a mantener el nivel de humedad bajo, lo cual hace que el ambiente se sienta más cálido. Este aparato puede ser particularmente útil en zonas de la casa como sótanos o baños, donde se acumula más humedad.

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