Diez cosas que tienes que probar en septiembre en Sevilla

Han vuelto muchos de los grandes en Sevilla y parece buen momento para volver a disfrutar de algunos de sus tesoros, pero también, ya que hace menos calor, nos podemos dar una vuelta por algunas de las poblaciones de la provincia y probar...hasta chapulines.

1. El sargo al ajillo de Barbiana (Sevilla)

Barbiana es uno de los clásicos de el centro. Su barra es uno de esos sitios para "acurrucarse" y disfrutar de tesoros como sus acedías fritas o las tortillitas de camarones. En esta ocasión nos paramos en estos filetes de pescado de roca (sargo) muy jugosos y con una sencilla salsa de verduras. Más info, aquí.

2. El Bacalao en tomate de Las Teresas (Sevilla)

El establecimiento celebra su 150 aniversario. Una buena manera de celebrarlo puede ser probando su impactante versión del bacalao en tomate. El bacalao, en taquitos, va ligeramente frito y luego sumergido en una majestuosa fritá de tomate de esas con tropezones minúsculos de verdura. Para colmo el sitio es bueno y barato. Más info en tomate, aquí.

3. Las croquetas del puchero de Casa Esteban (Tomares)

Al puchero habría que dedicarla por lo menos una rotonda en la provincia de Sevilla...la rotonda del puchero, pero también se puede homenajear a este plato con unas buenas croquetas, de esas cremosas por dentro y crujientes por fuera. En Casa Esteban, en Tomares, bordan la especialidad y la masa no la hacen con leche, sino por el propio caldo apucherado. Más info, aquí.

4. La tortilla de jamón de El Rinconcillo (Sevilla)

Cuantas veces, cuando hemos pasado un dia de esos de locos, llegamos a casa y pedimos que nos hagan una tortillita liá...es un plato que tiene poder relajante. En El Rinconcillo, es todo lo ccontrario porque su tortilla de jamón te exalta los sentidos por su jugosidad y porque lleva jamoncito del bueno. Aquí un recorrido por esta y más tapas interesantes del Rinconcillo.

5. Los chapulines de Sed de México (Tomares)

No te vamos a mentir, los chapulines son insectos. Si te apatece conocer la experiencia de zampártelos lo puedes hacer en este restaurante mexicano de El Aljarafe. Los ponen con un poquito de guacamole, por si te apetece mojarlos en algo. No te asustes, saben como a maiz tostado y su textura es como crujiente. Aquí nos comemos los caracoles...así que no hay que asustarse. Aquí más info de Sed de México y su curiosísima carta.

6. Los boquerones a la bilbaína de Martirio (Sevilla)

A todos nos encantan los boquerones...bueno a casi todos, que no hay que "exagerá". Quizás estemos hartos de comerlos siempre igual, en vinagre, fritos o en adobo. En Martirio, el nuevo establecimiento que han abierto en Gustavo Bacarisas, los ponen de una manera diferente. Van crudos y se hacen sencillamente con una salsa que le ponen por encima hirviendo. Aquí más detalle del milagro tapatológico.

7. El secreto ibérico de Traversuras (Gerena)

Te cuento. Cogen la pieza de secreto, ese trocito de cerdo ibérico que va como salpicado de vetas de grasa, y lo meten en una bolsa con una emulsión de pimiento y unas especias. Hay lo tienen un montón de horas, hasta que se pone más tierno que una almohada del Burrito Blanco. Luego lo cortan a tiras, plancha y a la mesa...No te digo ná. La tapa la ponen en Traversuras, un nuevo bar de cocina innovadora de Gerena. Aquí más detalles.

8. El mantecaíto de Casa Rafita (Sevilla)

Casa Rafita es otro clásico del tapeo sevillano que ha reabierto sus puertas tras el cierre por el Coronavirus. Su barra de bar de barrio donde no sólo puedes tomar tapas, sino unas risas como valor añadido vale la pena visitarla porque es casi una definición del bar clásico de Sevilla. Es famoso su mantecaíto, un pequeño bocadillo de filete de cerdo, jamón serrano y huevo de codorniz. Más info de Casa Rafita, aquí.

9. La ensaladilla de pulpo de Palo Santo (Sevilla)

Las ensaladillas de pulpo tienen cada día más seguidores, es una de las amayonesadas en alza. Este ejemplar que ponen en Palo Santo, en la plaza de La Gavidia, merece conocerse. Está jugosita y la mayonesa es de color "naranjita intenso" gracias a la que le añaden pimentón. Es de las que llevan tropezones y por lo alto, como coronación, una regañá de Picos Obando de Utrera. Más detalles amayonesados, aquí.

10. Los churros de rueda de la Taberna El Laurel (Dos Hermanas)

El churro es un objeto de gran interés tapatológico. Personalmente una de las cualidades que más aprecio en churrística es "la levedad" de la masa, esos interiores de churro etéreros, casi huecos, por la ligereza de la masa. En El Laurel de Dos Hermanas consiguen este efecto "ahuecado" y además están crujientitos. Tienen cafetería para tomarlos allí o te los preparan para llevar. Más detalles achurretados, aquí.