Caracoles y cabrillas en comodito
Iniciativas originales
Una empresa de Albaida del Aljarafe sirve caracoles y cabrillas a domicilio el mismo día en que se solicitan y con los guisos presentados en envases de cristal. Elaboran a diario unos 600 kilos
Resulta que por muy apetecible que se antoje la idea de disfrutar de unos caracoles en una terraza de Sevilla, cerveza en mano, no siempre resulta la mejor opción. ¿Qué tal saborearlos cómodamente sin moverse del sofá de casa? Manuel Felipe López con su empresa Caracoles Sevilla ha abierto la veda para los amantes de los gasterópodos que prefieren gozar de su sabor y compañía en el hogar, aquellos no pueden prodigarse en bares y terrazas o que, simplemente, necesitan optar por un envío a domicilio porque residen más allá de Despeñaperros donde su consumo no es tan habitual.
A todos ellos, Manuel Felipe López Cid, un carpintero que tras la crisis económica decidió reinventarse, ofrece caracoles blanquillos a la hierbabuena y cabrillas con tomate cocinadas con la receta heredada su madre y que pueden adquirirse a golpe de click a través de su página web. “Nuestro producto es casero, artesano, nada industrializado, libre de conservantes y colorantes y envasado en cristal. Nos lo piden desde muchos puntos de España aunque para la zona del Aljarafe y Sevilla capital tenemos reparto propio y gratuito”, relata López quien añade que “si el encargo para la península se hace antes de las 11 de la mañana, nuestros caracoles llegan en 24 horas”
Pedidos para Pamplona o Alicante
A Cid le resulta “especialmente curioso” que personas de ciudades tan alejadas de Sevilla como Pamplona o Alicante sientan una profunda devoción por un producto que considera “muy autóctono y local”. “Muchos de ellos nunca han visitado Sevilla, ni habían probado los caracoles hasta que conocieron Caracoles Sevilla. Les estamos acercando nuestra gastronomía y eso es estupendo”, afirma, satisfecho.
Las instalaciones de Caracoles Sevilla se encuentran en Albaida del Aljarafe, municipio del que es oriundo López Cid y donde también reside su madre, Antoñita Cid, pieza clave en este engranaje empresarial de gasterópodos a domicilio. “Ella es la que les da el punto exacto, la que revisa todas las ollas de caracoles antes de que salgan. Me ha enseñado todo lo que sé”, desvela el propietario de Caracoles Sevilla. Junto a Manuel Felipe y a Antoñita trabajan en Caracoles Sevilla una decena de personas para abastecer a diario de unos 600 kilos de caracoles a tiendas, bares y particulares de Sevilla y el Aljarafe. “Sólo tenemos caracoles cuando están en temporada. No tenemos fecha de inicio ni de fin. Todo depende de cómo y cuándo venga el animalito, porque buscamos la calidad por encima de todo”.
Los blanquillos a la hierbabuena y las cabrillas con tomate de Caracoles Sevilla se cotizan a seis y siete euros, respectivamente, el envase de un kilo. Los repartos a Sevilla capital y a la zona del Aljarafe no tienen gastos de envío ni tampoco aquellos a nivel peninsular que superan los 5 kilos.
Temas relacionados
No hay comentarios