¿Cuánto caldo es necesario para cocer el arroz?

Una de las incógnitas que suelen darse a la hora de cocinar el arroz es cuánto caldo debemos añadir para su cocción. Calcular la cantidad exacta para que el arroz quede perfecto es cuestión de práctica y de ensayo-error, porque no hay una medida ideal para ello y siempre dependerá de la cantidad y del tipo de arroz, con algunos consejos de los expertos conseguiremos nuestro propósito.

La cuestión es quedarnos en la medida justa, sin pasarnos y sin que nos falte y como hemos mencionado, distinguir bien el tipo de arroz que queremos consumir antes de ponernos manos a la obra.

¿Qué arroz vamos a cocinar?

• Si la intención es preparar un arroz seco, la proporción del caldo debe ser: 1 de arroz por 2 o 2 y media de caldo.
• Si vamos a cocinar una receta de arroz meloso, con cremosidad, añadiremos más caldo: 1 parte de arroz por cada 3 de caldo.
• Si nuestro plato trata de un arroz caldoso añadiremos una más de caldo, es decir: por cada 1 medida de arroz, 4 de caldo.

Aún así, es importante tener en cuenta que no se trata de una medida concreta y exacta, sino que podrá variar en la cocción e incluso podremos añadir más o retirar si vemos oportuno, algunas partes de caldo para conseguir la textura que deseamos.

Trucos para conseguir el arroz perfecto

• La elección del grano de arroz es otro paso importante, porque dependiendo de la receta y del tipo de plato que vayamos a elaborar, determinaremos la categoría y por lo tanto, variará la forma de cocerlo. En el caso del arroz meloso, SOS Especial Caldosos y Melosos hará que consigas más fácilmente los resultados que esperas.
• A la hora de cocinar también influirá la potencia de nuestros fogones o vitrocerámicas, al igual que lo hará el recipiente con el que trabajemos. Si cocinamos en una cazuela más plana y de gran diámetro, las típicas para hacer paellas, al tener esa forma, el caldo se calienta más y se evapora antes, por lo que necesitarás más agua, que si por ejemplo estás cocinando en una olla de más profundidad.
• Puedes comprobar previamente el tiempo que tarda en entrar en ebullición, si en la cazuela vacía añades agua y contabilizas el tiempo que necesita para hervir.
• Si prefieres cocinar tu arroz directamente sin pruebas, no le pierdas ojo y mantente pendiente para corregir el caldo y así evitar que llegue a pegarse al fondo.
• Otro truco es que una vez sofrito el arroz absorberá menos agua y que según los ingredientes que tenga el fondo de nuestro arroz, la cantidad de caldo también variará, ya que están los que sueltan agua como las verduras y los moluscos (cebolla, tomate ,almejas, rape...), por lo que podremos añadir un poco menos de caldo en estos casos.

Como todo en el arte de la cocina, el prestar atención a los detalles y saber cómo nos gustan los resultados es esencial para ir aprendiendo, siguiendo estos trucos seguro que te resultará más fácil ¡a disfrutar!