El Silencio descarta pasar por la estrechez de Daoíz

La Madrugada avanza en una solución con vigencia provisional para dos años. El Gran Poder discurriría el primer año por Cuna y la Macarena por Puente y Pellón.

El palio del Silencio pasó con apuros por la estrechez de Daoíz.
El palio del Silencio pasó con apuros por la estrechez de Daoíz.
Juan Parejo

04 de marzo 2015 - 05:03

Un plan de dos años a modo de prueba para repartir los sacrificios entre todas las cofradías. Ésta podría ser la solución a Madrugada, tan ansiada por parte del Consejo. Fuentes del mismo aseguraron este martes a este periódico que se estaba trabajando en este nuevo plan en el que habrían estado profundizando por la tarde por los hermanos mayores y los cargos generales de manera muy satisfactoria. La reunión habría sido muy productiva y sólo faltarían pequeños flecos para cerrar un acuerdo que hoy mismo, o mañana, podría ser oficial.

El primer año, la Hermandad del Gran Poder regresará a San Lorenzo por la calle Cuna, por lo que la Macarena buscará la Encarnación a través de Puente y Pellón. La noticia de última hora es que el Silencio ha descartado pasar por la estrechez de Daoíz debido a los problemas que encontraron en la prueba efectuada el lunes por la noche, por lo que seguirá por Javier Lasso de la Vega para luego girar a la derecha por Amor de Dios y a la izquierda por San Miguel para dar tiempo a que el palio de la Esperanza Macarena cruce por Trajano. Una vez que la Macarena haya pasado, retomará su recorrido habitual hasta su iglesia, descartándose también el rodeo por Santa Vicente María. Las hermandades que llegan por la zona de la Magdalena, el Calvario y la Esperanza de Triana, serían las dos menos perjudicadas de este primer año, ya que no tendrían la presión del Gran Poder en el cruce de Zaragoza. Por su parte, los Gitanos tendría que alargar también su recorrido por la zona de San Andrés para así darle más espacio a la Macarena en su salida a la Plaza de la Encarnación.

Estas opciones, según ha podido saber este periódico, plantea varios problemas. Principalmente el de la seguridad. Desde la salida de la Catedral y hasta la Plaza del Salvador irían juntas tres hermandades de las dimensiones del Silencio, el Gran Poder y la Macarena, cuyos cortejos superan las 6.000 personas. Preocupa mucho la cantidad de público que se puede reunir, por ejemplo, en la calle Francos y que podría dificultar el paso de las hermandades. También se daría la circunstancia de que el Señor del Gran Poder estaría menos tiempo en la calle y discurriría por menos calles, por lo que el público se concentraría más.

En el segundo año las hermandades más sacrificadas serían el Calvario o la Esperanza de Triana, que tendrían que dar algún rodeo para dejar libre el cruce de Zaragoza a Gravina al Gran Poder, que discurriría por el que es su recorrido desde 1967. La primera podría buscar la carrera oficial por la zona del Museo, algo que parece menos probable, y la segunda podría alargar su recorrido por Marqués de Paradas y Canalejas y Bailén. Estos flecos son los que faltarían por cerrarse para sellar el acuerdo definitivo. Por su parte, la Hermandad de la Macarena regresaría por la calle Cuna en el que es su recorrido habitual.

Además de estos nuevos recorridos, la jornada se alargaría para que las hermandades pudieran disponer de más tiempo de paso. Las más beneficiadas por ello serían la Esperanza de Triana y la Macarena, que dispondrían de unos 20 minutos cada una, el Silencio ganaría 10 minutos, mientras que los Gitanos y el Gran Poder tendrían 5 minutos más cada una. Estos nuevos repartos obligarían a adelantar la llegada del Silencio a la Campana, que pediría la venia a las 0:55 y a retrasar el paso de los Gitanos que lo haría sobre las 6:40.

Todos estos cambios se harían a modo de prueba para luego evaluar cuál es la mejor opción. Al Consejo de Cofradías le quedan dos Semanas Santas y por ello han optado por un plan que no se alargue más allá de 2016.

stats