Dorantes, Arcángel, Eva Yerbabuena o Miguel Poveda: los grandes maestros llegan a la Bienal de Sevilla 2024

En septiembre, para esa “inmensa minoría” de aficionados al flamenco a la que pertenezco, la abrumadora cercanía del regreso a las obligaciones de todo tipo incluye un estímulo revelado en un suspiro que mezcla espanto y consuelo: “Este año hay Bienal”.  

Una expresión que define la tensión ante un apasionante y agotador maratón jondo que los jartibles viviremos con la avidez de un buffet libre; dispuestos a un esfuerzo hercúleo para paladear la mayoría de los 62 espectáculos y una veintena de actividades paralelas que plantea la XXIII edición de la Bienal, que este año promete jondura y pellizco bajo el lema Olé de nuevo. Para lograrlo, juega a lo seguro con nombres consagrados y un papel prominente para el cante; desligándose así del espíritu heterodoxo que caracterizó la edición anterior, que condujo el gestor cultural Chema Blanco. Para ello, su director, el periodista Luis Ybarra (Sevilla, 1996), cuenta con un presupuesto récord de 2.200.000 euros.  

Durante cuatro semanas, el festival flamenco más grande del mundo nos llevará de esquina a esquina de la ciudad formando una comunidad de ávidos catadores del arte jondo, ojalá hermanados por el entusiasmo después de cada recital. De seguro dormiremos poco, pero eso no preocupa en una ciudad acostumbrada a trasnochar en busca de la emoción.  

 Los grandes nombres protagonizan las 'Noches Únicas' 

Ybarra ha vertebrado la programación de la Bienal en torno a una serie de recitales “pensados para ocurrir, no para girar”, que prescinden de conceptos rebuscados o grandes producciones y se sustentan en la talla artística de sus protagonistas. Serán las denominadas Noches Únicas; conciertos sin vocación de repetirse en los que la grandeza del toque, el cante y el baile son el gran reclamo. Así, con el Teatro de la Maestranza como principal escenario, el mayor activo de este cartel son las figuras que lo encabezan, la mayoría, asiduas de la Bienal.  

 De entre ellas sobresale el regreso al festival de Miguel Poveda catorce años después de su última aparición, quien ha agotado dos días el aforo del Maestranza con Federico y el cante, un repaso a las voces jondas que inspiraron a García Lorca en la confección de su obra poética. Será el 13 y 14 de septiembre. Arcángel se sube también al escenario maestrante el día 21 con “un homenaje al territorio a través de un recorrido por el repertorio clásico”; una oportunidad de oro para apreciar la mirada a la tradición de uno de los cantaores más influyentes de este tiempo.  

 Esta vez como Estreno Absoluto, Dorantes posará sus manos sobre el teclado del clavicordio para aplicar su raíz flamenca al repertorio de Dominico Scarlatti, el compositor barroco que ha despertado la inspiración del artista lebrijano para estas Scarlattianas; que sucederán en la Iglesia de San Luis de los Franceses en dos pases el día 22 de septiembre.  

 El indiscutido líder de los jóvenes cantaores, Israel Fernández, acude a la cita sevillana en un recital íntimo con el único acompañamiento de la guitarra de Antonio el Relojero, un relicario del toque de principios del siglo XX. Con todo vendido, actuarán el día 22 en el Teatro Alameda.  

 La combinación de una exquisita sensibilidad y una tortuosa vida personal han convertido a Rafael Riqueni en la encarnación del artista romántico, lleno de genio y fragilidad, que Sevilla adora. El guitarrista trianero estrenará su último disco, Nerja, en el incomparable escenario del Real Alcázar el 24 de septiembre.  

Solo a Sevilla es el título que la bailaora Eva Yerbabuena dedica a la ciudad en la que vive desde hace lustros. Para ello ha creado un recital único en el que afronta esa dualidad entre tradición y experimentación que define su obra para el día 25, de nuevo en el Maestranza. Otro nombre estelar del baile, Farruquito, acude a ese mismo teatro el 27 de septiembre con toda la grandeza que encierra el escueto título de su Recital de Baile.  

Sobre esas mismas tablas podrá disfrutarse de los últimos pasos de la maestra trianera Manuela Carrasco, una institución que se retira después de una vida consagrada a un baile racial y sobrio. Presentará Cómo el Ave Fénix el 29 de septiembre. 

La única coproducción internacional de la Bienal se ha reservado para el concierto de clausura. Se trata de la adaptación de la ópera Carmen a cargo del bailaor Israel Galván junto a la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla el día 5 de octubre en el Maestranza, donde también se celebrará la gala inaugural el día 12 de septiembre, con Tomatito dirigiendo un homenaje a Paco de Lucía en el décimo aniversario de su fallecimiento, en el que Poveda, Aurora Vargas e Israel Fernández podrán el cante.