El puzle del caso Marta

Un puzle con muchas piezas que no acaban de encajar. Ésta sería la mejor forma de describir en qué se está convirtiendo la investigación por el asesinato y desaparición de la joven Marta del Castillo, del que se han cumplido ya más de ocho meses.

Las últimas declaraciones del asesino confeso, Miguel Carcaño, de su ex novia, la menor de 14 años que reside en Camas, y la nueva búsqueda en una zanja próxima a esta localidad, no han hecho más que enturbiar una tortuoso sumario que acumula ya más de 4.000 folios.

Aunque la Policía sigue dando mayor credibilidad a las primeras declaraciones de los imputados y ahora lamenta que no tiene posibilidad de volver a interrogarles, el nuevo testimonio de la menor de Camas ha vuelto a suscitar las dudas sobre la forma en la que los imputados se deshicieron del cadáver. La ex novia de Miguel Carcaño insistió esta misma semana ante la Policía en que el joven le confesó que habían arrojado a una zanja próxima a su domicilio en la localidad camera, lo que desembocó en una nueva jornada de búsqueda con máquinas excavadoras que ha supuesto un nuevo mazazo a las esperanzas de la familia de Marta de recuperar el cuerpo. El padre de la joven, Antonio del Castillo, no comprende que la instrucción pueda cerrarse sin localizar a su hija y cree que hay que seguir investigando. "No hay un crimen perfecto, sino investigaciones imperfectas", ha llegado a afirmar el padre.