La ex mujer del directivo del BBVA asesinado pide al juez su puesta en libertad

La defensa de Natividad Cantero, que se encuentra en prisión provisional como presunta autora del asesinato de su ex esposo, el directivo del BBVA Andrés Toro, ha solicitado al juez de Sanlúcar la Mayor que instruye el caso su puesta en libertad, al estimar que no hay pruebas contra ella.

Fuentes de la defensa de la imputada explicaron ayer que los testimonios de los testigos de cargo incurren en "falta de credibilidad", como sucede, a juicio de la representación de Natividad Cantero, con su tío político, que inicialmente reveló que ésta le había confesado el asesinato de su ex marido. Según la defensa, este testigo ha realizado cinco declaraciones sobre los hechos -cuatro ante la Guardia Civil y una en el juzgado-, además de participar en un careo con Natividad Cantero, y sólo en una de estas manifestaciones acusó a la mujer de estar detrás del crimen. El juzgado ratificó la denuncia, pero según la defensa incurrió en múltiples contradicciones, al afirmar en unas ocasiones que se había enterado de la autoría en la casa, otra en el hospital, o en el trayecto de la casa al hospital.

En el careo con la imputada, que se encuentra en prisión desde el pasado 31 de julio, el denunciante llegó a afirmar que no era cierto que Natividad Cantero le hubiese confesado el crimen, y añadió que ante la Guardia Civil contó esta versión porque le habían "presionado" diciéndole que iba a ir a la cárcel.

El testigo compareció recientemente en un programa de televisión, donde insistió en negar la confesión, y la defensa ha aportado un informe que pone de manifiesto que desde 2003 padece una enfermedad mental y está en tratamiento, por lo que según el abogado de Natividad Cantero, el testigo tiene "falta de credibilidad".

En cuanto a otro de los principales testigos, el vigilante de la urbanización La Juliana que aseguró que vio a la presunta asesina el día en que se cometió el crimen, el pasado 15 de junio, la defensa cree que su testimonio tampoco es contundente para acreditar la autoría. Así, la defensa señala que en su declaración inicial ante la Guardia Civil, el vigilante no dijo que viera el coche aquel día, un extremo que reconoció en su comparecencia en el juzgado, donde afirmó que ya se lo había contado a la Guardia Civil a pesar de que no se refleja en la declaración. El abogado defensor también cuestiona la credibilidad de este testigo, por cuanto no pudo identificar ni el color del vehículo supuestamente empleado por Natividad Cantero.

La defensa argumenta la petición de libertad en otros aspectos como que Natividad Cantero no tenía llave de la vivienda de la urbanización donde tuvo lugar el crimen, por lo que no se ha acreditado cómo pudo acceder a la misma, y además cuenta con una coartada, ya que su hijo estuvo con ella hasta las seis de la tarde, cuando se trasladó al hospital. La defensa también señala que en los análisis científicos no se hallaron restos de pólvora en Natividad Cantero y que tampoco se ha demostrado que tuviera en su poder el día de autos el teléfono de la víctima.