"Le indiqué a mi hermano que no apareciera por el barrio"
Juicio del caso Marta
Javier Delgado reconoce estar en el piso cuando llegó Miguel, que coincidiría con él "diez minutos". "Es posible que me refiriera a la gente que buscaba a Marta como 'esa mierda", declara.
Javier Delgado ha vuelto a negar ante el juez su implicación en la desaparición y muerte de Marta del Castillo. El hermano del asesino confeso ha mantenido su versión de que pasó la tarde del 24 de enero entre la casa de su ex mujer y el bar de copas que regentaba en la avenida Juan Antonio Cavestany.
A preguntas del fiscal, Delgado ha respondido que sólo coincidó con su hermano "diez minutos" en el piso de León XIII. "Yo estaba en el cuarto de baño y escuché que se abría y cerraba la puerta. Como sólo teníamos llave él y yo, y yo estaba dentro, dí por hecho que era él. Le di una voz y vino al aseo, le pregunté si iba acompañado y él me esbozó una sonrisa, por lo que entendí que estaría con su novia", ha expuesto el hermano de Carcaño.
Delgado ha señalado, sin embargo, que creía que esa chica sería Rocío, la menor de Camas que era novia de Carcaño, y no Marta del Castillo. "No tuve conciencia de que era Marta hasta la madrugada, cuando vinieron a preguntar por ella una señora y un señor".
El acusado ha detallado que salió de la casa de León XIII a las 20:40 y fue al domicilio de su ex mujer en la calle Tharsis en el autobús de la línea 2. Allí llegó sobre las nueve y estuvo desde entonces hasta las 23:30 jugando con su hija y viendo una película con ella. Luego quedó con su novia, María García, que lo recogió en coche y lo llevó hasta el bar que regentaba. El negocio cerró a las 3:10 y de allí se fue a otro bar que frecuentaba en la calle Albaida, donde tomó una copa.
Volvió a su casa a las 4:00 de la madrugada, llamó a María para que le abriera la puerta y, media hora después, aparecieron en su casa los padres de unos amigos de Marta del Castillo. "No recuerdo nada raro ni que el piso oliera a limpio", ha respondido Delgado, añadiendo que la habitación de Carcaño estaba cerrada, "como era costumbre".
"¿No es cierto que usted colaboró en la ocultación del cadáver, envolviéndolo para que luego se lo llevaran su hermano, Samuel y el Cuco?", le ha preguntado el fiscal. "Nada de lo que usted supone respecto a mí en esa franja horaria es cierto", ha respondido Javier Delgado, que se está mostrando muy tranquilo durante todo el interrogatorio y mientras se escuchan sus pinchazos telefónicos.
El hermano de Carcaño reconoció que "es posible" que se refiriera a la gente que buscaba a Marta como "esa mierda", aunque el tribunal no admitió la pregunta formulada por la acusación particular porque, según dijo el juez Javier González, la cuestión puede "levantar ampollas innecesarias".
Durante la declaración de Javier Delgado se oyó uno de los pinchazos practicados a su teléfono, en el que le comenta a su hermano que la Policía Científica ha estado tomando muestras en su casa y le ha preguntado cuántas sillas de ruedas había en la vivienda. "Yo le he dicho que había dos carros, ¿vale?", le asegura Delgado a Carcaño, en lo que las acusaciones interpretan como una clara indicación de lo que tiene que decir en una futura declaración ante la Policía.
El fiscal, como con todos los imputados, cerró su turno preguntando por el paradero de Marta del Castillo. "Nunca he sabido dónde está el cuerpo de Marta", respondió Javier.
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