Menos sueldo para funcionarios y adiós al 'cheque-bebé'

El Gobierno bajará el sueldo del personal del sector público un 5 por ciento de media este año y lo dejará congelado en 2011, suspenderá para 2011 la revalorización de las pensiones, salvo las mínimas y no contributivas y recortará 6.045 millones de inversión en 2010-2011. Además, eliminará el cheque-bebé. Los ministros verán recortado su sueldo en un 15 por ciento. Estas son algunas de las medidas que anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en el Pleno Congreso de los Diputados, con el objetivo de reducir el déficit, y que serán aprobadas "para su entrada en vigor inmediata" en el Consejo de Ministros de la semana próxima. Zapatero afirmó que muchos ciudadanos no entenderán el esfuerzo que se pide desde el Ejecutivo, pero señaló que son "imprescindibles" y procuran ser lo "más equitativas posibles". El presidente del Gobierno pidió un "esfuerzo nacional" para llevar a cabo la tarea de llevar el déficit al 3 por ciento en 2013.

El presidente del Gobierno anunció además que se eliminará la retroactividad en la aplicación de la Ley de Dependencia y que se reducirá el gasto farmacéutico. A las comunidades autónomas y ayuntamientos, el presidente del Ejecutivo les pidió un ahorro adicional de 1.200 millones de euros.

Todas las medidas adelantadas por Zapatero, entre las que también está un recorte de 600 millones de euros en ayuda al desarrollo, se incluirán en un decreto ley que aprobará el Consejo de Ministros la semana que viene, "para su entrada en vigor inmediata", según anunció el jefe del Ejecutivo. Zapatero precisó que el viernes de esta semana el Consejo de Ministros examinará el techo de gasto de los Presupuestos Generales del Estado para 2011 y el plan de austeridad 2011-2013, que incorporará las decisiones anunciadas en el Pleno.

Entre las medidas anunciadas por el presidente del Gobierno se encuentra eliminar la retroactividad en la aplicación de la Ley de Dependencia, con una reforma en la que se establecerá un tiempo máximo de seis meses para la resolución de las solicitudes. De esta forma, una vez que entre en vigor la nueva norma se suprimirá el pago de la cantidad pendiente desde que se hizo la petición. Los derechos de retroactividad que se hayan generado podrán pagarse en un plazo máximo de cinco años.

En cuanto a los planes para reducir el gasto farmacéutico, se comenzará por reducir el precio de medicamentos no genéricos excluidos del sistema de precios de referencia, de manera escalonada, entre un 10 y un 15 por ciento, teniendo en cuenta el año de registro de los medicamentos. En este apartado, el Ejecutivo quiere promover además un consumo de medicamentos más eficiente y vinculado a las necesidades reales de los pacientes, adecuando el número de unidades de los envases de los medicamentos a la duración estandarizada de los tratamientos, de acuerdo con las indicaciones de la comunidad científica. También se posibilitará la dispensación de los medicamentos en unidosis, mediante el fraccionamiento de los envases, de manera que el paciente pueda comprar el número exacto de unidades que necesite.

Estas medidas pretenden cumplir con el compromiso anunciado el pasado fin de semana en Bruselas, de acelerar la reducción del déficit en un 0,5 por ciento del PIB adicional en 2010 y en un 1 por ciento en 2011 (5.000 y 10.000 millones de euros, respectivamente). Zapatero señaló que estas medidas son "imprescindibles" y procuran ser "lo más equitativas posibles" para cumplir con el compromiso de reducir el déficit a niveles más cercanos al 3 por ciento en el año 2013, y pidió un "esfuerzo nacional" para llevar a cabo esta tarea.

Rodríguez Zapatero admitió que muchos ciudadanos no podrán entender el esfuerzo que se les pide con las nuevas medidas para reducir el déficit, pero afirmó que son "imprescindibles" para alcanzar ese objetivo y aumentar la confianza en la economía española. Durante su primera intervención en el Pleno de la Cámara Alta, Zapatero reconoció que para el Gobierno "no es fácil" tomar medidas de este tipo. "Pero estamos convencidos de su necesidad", señaló Zapatero, que explicó que las medidas pretenden también repartir el esfuerzo nacional que se pide a todos los ciudadanos y adelantó que gran parte de ellas se aprobarán la próxima semana en Consejo de Ministros. Ese día se comenzará a estudiar además el techo de gasto para los Presupuestos de 2011.

Reducir el déficit y fortalecer el euro

El jefe del Ejecutivo explicó además que al objetivo de reducir el déficit al 3 por ciento se ha unido la nueva meta de contribuir a la estabilidad de la zona euro, ya que las acciones para avanzar hacia la sostenibilidad de las cuentas públicas son particularmente necesarias en los países que se están viendo sometidos a la presión de los mercados financieros, como es el caso de España.

Zapatero admitió que el esfuerzo que hace el Gobierno es "considerable" porque supone reducir en tan solo dos años 5,2 puntos el déficit y cumplir con dos terceras partes del compromiso adquirido para los próximos cuatro años. "No es fácil para el Gobierno aprobar las nuevas medidas y la dificultad no se aminora por el hecho de que estemos convencidos de su necesidad", subrayó, y explicó que la decisión se ha tomado en el marco del compromiso conjunto de los países de la Unión para estabilizar los mercados, abaratar la deuda y garantizar su pago, lo que llevará a restablecer la confianza en el euro.

En este sentido, recordó que el programa español para reducir el déficit recibió una valoración global positiva de la Comisión Europea en marzo de 2010 y que el Fondo Monetario Internacional (FMI) lo calificó de "riguroso", aunque algunos reclamaron mayor concreción. Recordó que las medidas suponen un nueva reducción del gasto de 15.000 millones en 2010 y 2011, al tiempo que se mantendrán las medidas ya en marcha para impulsar la recuperación, como las acordadas en las negociaciones de Zurbano, la Ley de Economía Sostenible y las nuevas líneas de los créditos ICO.

El jefe del Ejecutivo aseguró que las medidas aprobadas pretenden ser eficientes porque contribuirán a sanear las arcas públicas afectando lo menos posible a la inversión pública para conciliar la recuperación del déficit con la recuperación. Zapatero insistió en que muchos ciudadanos no entenderán que se pida más esfuerzo, compromiso y sacrificios al mismo tiempo que se les anuncia la recuperación, pero aseguró que es "ahora" cuando el país lo necesita para cumplir con sus compromisos europeos. "No es fácil para un Gobierno, para cualquier Gobierno, dirigirse en estos términos a sus conciudadanos", admitió el presidente, quien consideró que "menos lo es aún" para un Gobierno que se ha empeñado durante años en dirigir sus esfuerzos a mejorar la situación de la mayoría de los ciudadanos.

"La situación es difícil y sería insensato ocultarlo. Pero puede asegurarles a todos que el Gobierno no desfallecerá y está seguro, estamos convencidos, de que lograremos salir adelante", indicó Zapatero, quien al comienzo de su discurso defendió la actuación "coherente" del Gobierno durante la crisis.

En otro orden de cosas, el jefe del Ejecutivo se refirió a la "amenaza tan seria" que ha sufrido la unión monetaria en los últimos días y la "consecuente" respuesta que ha aprobado el Ecofin creando un Mecanismo Europeo de Estabilización que movilizará hasta 750.000 millones de euros en defensa de la unión monetaria y las economías de la euro zona. Además, defendió la postura "clara y activa" que ha mantenido España en favor de una respuesta europea desde que se planteó el rescate a Grecia.