En medio de Pimpinela hizo propuestas
El candidato de IU esquiva el arrinconamiento e introduce su programa, pero no se libra del rapapolvo de Susana Díaz
ANTONIO MAÍLLO
CORRÍA el ecuador del debate y Antonio Maíllo afeó a Susana Díaz su estrategia de interrumpir al candidato del PP: "Una presidenta del Gobierno tiene que ser educada", dijo. A continuación, a ambos, les reprochó "cómo se puede tener tanta cara" por eludir responsabilidades sobre la corrupción. "Ustedes están en el tiqui-taca, son una especie de Pimpinela".
Maíllo entró al debate con la intención de introducir propuestas electorales de IU (la banca pública, un plan de empleo, el aumento de profesores,...), utilizar ejemplos didácticos (sobre la exportación de aceite ilustró el recorrido "desde que se coge la aceituna hasta que se parte en el salmorejo"), criticar las políticas de PSOE y PP (con la reforma de la Constitución que "les ilegitima para hablar de políticas sociales") y esquivar el papel de árbitro de partido de tenis al que le iban a relegar, pero se vio sorprendido por la actitud de Díaz. Cuando por primera vez le interrumpió, Maíllo la señaló con el dedo: "No se crea la dueña del debate, ni de Andalucía".
En su siguiente turno, Maíllo recordó a PSOE y PP que en el debate de Canal Sur les reclamó que pidieran perdón por la corrupción, sin respuesta. Susana Díaz le lanzó su ataque más furibundo de la noche, le negó que cuestionase su honestidad y le conminó a mirar en su partido, en el Ayuntamiento de Sevilla, "donde han tenido que poner de candidato a su número ocho". A Maíllo, que había presumido de la "corrupción cero", le faltó la réplica. "Usted no tiene palabra", respondió Maíllo en alusión a la ruptura del pacto en la Junta para llevarse el rapapolvo de Díaz, que tenía para todos y le llamó "resentido".
El candidato de IU, que al inicio había reprochado a los aspirantes de PSOE y PP "qué poco se aprende en los aparatos políticos, las puñalaítas", dijo que regresará a su plaza de profesor en un instituto de Aracena y puso como ejemplo a Julio Anguita y Pepe Mujica. Al final del programa, en IU no sabían si habían asistido a un debate sobre política o de Gran Hermano.