La obesidad tiene nombre femenino

La eliminación de eufemismos y de términos con sentido negativo son algunos de los puntos clave de una investigación realizada en la Universidad de Málaga (UMA) y que apunta a la existencia de un mensaje transmitido por los medios de comunicación o promovido por la industria de la cosmética o de la moda en las que produce una estigmatización de las personas, especialmente las mujeres, que no cumplen el canon.

Susana Guerrero, catedrática de Lengua Española de la UMA, ha publicado un novedoso estudio -Léxico e ideología sobre la gordofobia en la comunicación digital-, que se centra en un conjunto de textos obtenidos de las páginas web más destacadas del activismo feminista y sobre la gordura, procedentes de webs y revistas de moda, y en artículos en la prensa digital extraídos de diversas secciones (salud, ciencia, corazón, mujer, dieta y nutrición) entre 2012 y 2019.

La investigación registra la presencia de un discurso sobre la gordura ampliamente transmitido por la industria cosmética y de la moda a partir de la segunda mitad del siglo XX, un mensaje cuestionado por el ciberactivismo feminista, sobre todo a partir del 15-M, cuando comienza en España el movimiento antigordofobia.

"Los discursos convencionales que atañen a belleza y moda no hacen una crítica explícita a los cánones de belleza; en ellos no aparece el término gordo sino que se opta por expresiones eufemísticas y metafóricas (curvy, voluptuosa, talla grande, kilos de más)", apunta Guerrero.

De los 100 textos analizados por esta profesora se registran 85 formas de aludir a la gordura, distribuidas en aquellas referidas sólo a mujeres (43), sólo a hombres (17) o a ambos sexos (25). Los resultados revelan que el 50% de los términos constatados se refieren exclusivamente a mujeres, mientras que el 20% se refiere a hombres. El 30% corresponde a neologismos o eufemismos: curvy referido a hombre (1) o a mujeres (10), gordo (4) o gorda (27) y gordibueno (4) y gordibuena (16), por ejemplo.