El mordisco de una serpiente destapa un piso con reptiles exóticos en Almería: un varano, una tarántula rosa, una pitón albina, una boa constrictor...

La Guardia Civil ha investigado a dos personas tras descubrir un piso en el que hallaron dos serpientes, una tarántula y tres perros potencialmente peligrosos en malas condiciones sanitarias, después de que uno de los investigados acudiese al hospital por la mordedura de uno de los ofidios.

Según ha informado este domingo en una nota la Comandancia de Almería, la investigación ha sido llevada a cabo por el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), en colaboración con el Ministerio para la Transición Ecológica, y se imputa a los sospechosos delitos contra la flora y fauna, seguridad colectiva y maltrato animal.

Esta actuación se inició después de que uno de los investigados acudiera al Hospital Universitario de Poniente, en El Ejido (Almería), tras haber sufrido una mordedura de serpiente.

El investigado recibió el alta médica, sin requerir la administración de ningún antídoto, pero los indicios obtenidos llevaron a los investigadores a realizar el registro de su vivienda.

Así, los agentes encontraron varios animales exóticos protegidos que no se encontraban en condiciones adecuadas y que carecían de la documentación reglamentaria correspondiente. Además, estas personas poseían tres perros potencialmente peligrosos.

Entre los animales había un varano acuático, una tarántula rosa y una serpiente real de California. Además, también se encontraron dos ejemplares de especies CITES: una pitón albina y un boa constrictor, que carecían de identificación mediante microchip o documentación.

Dichas especies disfrutan de una protección especial que regula el comercio internacional de animales y plantas silvestres.

Por otra parte, se hallaron tres perros potencialmente peligrosos que no tenían agua y alimento y que se encontraban en un entorno con graves deficiencias higiénico-sanitarias, además de carecer de las vacunaciones obligatorias.

Las especies intervenidas han sido trasladadas a un centro de custodia especializado, designado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO).