Una media luna con demasiada gente

Debate a seis

Un debate a seis se revela como una fórmula de diálogo a trompicones difícil de descifrar para el espectador

Hubo una voluntariosa puesta en escena por parte de TVE

Lo más atinado, el cintillo de colores según el candidato

Los participantes y moderadores del debate electoral de este lunes en TVE

La televisión pública, la próxima o la centralista, suele ser linsojera de cronómetro con nuestros políticos. Los líderes se van turnando por las noticias con sus soliquios y sus observaciones ventajistas. Nuestros representantes dejan los debates y golpes de efecto a sus otros segundos en los informativos cuando están enfadados en sus cámaras parlamentarias. La gimnasia dialéctica la practican poco. Así que cuando se reúnen seis de una tacada se forma un barullo de diretes y reproches con poca sustancia, una desbandada de frases hechas que hasta el conductor principal del debate Xabier Fortes, tuvo que azuzar a esta media luna de presidenciables. Un presidente, un pretendiente enamorado y cuatro asaltadores, aunque el papel cantante lo asumía Macarena Olona, que en estas elecciones andaluzas cumple el papel que hizo Pablo Iglesias en las pasadas elecciones madrileñas. Miren en google qué pasó entonces por si no se acuerdan.

Fue una noche de Andalucia, y acentos andaluces (menos el de Olona) para toda España, en La 1, una cadena donde lo andaluz tiene poca presencia y de ahí que no estuviera a disposición ni un rostro de informativos vinculado a la actualidad del sur que se encargara ayer de este especial a la hora de MasterChef. El gallego Xabier Fortes abordó un trabajo en su línea, es el anfitrión del nocturno del 24 Horas, pero si TVE fuera una cadena donde Andalucía tuviera el peso que se merece al menos por demografía habría una mayor cantera para haberse hecho cargo de una emisión así. Al lado de Fortes, la delegada territorai, la sonriente Paloma Jara, que no es rostro diario de la cadena.

El plató de TVE en Sevilla son unas instalaciones infrautilizadas, así que bievenidas sean estas fiestas aunque surgiera un programa de ritmo encorsetado y apariciones calculadas. Con el logo en el centro, y los haces azules al fondo, las pantallas animadas traseras tuvieron aspecto de frigorífico en algunos momentos. La animación de los leds sobraba, despistaba sobre los discursos. Lo más atinado de la realización, el cintillo con el color distintitvo de cada candidato. Era una señalización útil sobre todo para los que vieran el debate fuera de Andalucía y que no están tan familiarizados con estos líderes.

TVE lo hizo anoche aceptablemente bien. Respecto a los debates de la Academia este encuentro andaluz no daba mal ante la audiencia pero el problema era que faltaba mordiente real entre los participantes. La 1 preparó una mesa de análisis paralela con contertulios profesionales de La Sexta más entretenidos que estuvo más animada.

Moreno Bonilla, que jugaba a no perder, se presentó con terno azul y corbata verde, una combinación poco favorecedora, habrá que pensar que está mejor asesorado en otros aspectos. Es quien llegaba con más escenografía aprendida en su gesticulación. Ya lo hacía cuando era el becario en la oposición. El compinche Juan Marín se pasó de maquillaje o de bronceador y Juan Espadas optó por ir sin corbata, prenda que le hubiera favorecido en su aspecto: no se puede jugar tanto al cortoplacismo. El de Sanlúcar también quiso prescindir de formalidad.

Inmaculada Nieto decidió combinar el traje blanco con la blusa morada, iba de logo: Olona, que para eso pisa firme, llevaba un pantalón holgado oscuro para su camisa nueva; y Teresa Rodríguez lucía un llamativo floreado informal, entre naranjas, verdes y morados, como una cuñada llegada de La Caleta en la que hay que confiar.

Sólo con el aspecto de estos atriles en semicírculo ya se presentía que la noche iba a ser rutinaria, un punto fría. Una inapetencia como la que siente a estas alturas mucho más electorado andaluz que el que aparece en los sondeos. Esa sensación de inapetencia es la que favorece al PP y es la que ha favorercido el bipartito en todos estos años. La 1 apenas la ve el 7% de los andaluces y Canal Sur, el 8%. Los políticos de Andalucía van a aparecer en estos dos lunes en sendas cadenas de las que la mayoría de los espectadores se sienten extraños. Es improbable que hayan reunido una buena parroquia estos candidatos que iban anoche a ninguna parte.

2 Comentarios
Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último