Llega 'Aitor', la primera gran borrasca del otoño que afectará a Andalucía

Aitor, la primera borrasca de gran impacto del otoño, dejará las próximas horas importantes lluvias en el noroeste peninsular (80 litros por metro cuadrado en 12 horas), fuertes rachas de vientos y temporal marítimo, según ha avanzado Rubén Del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Pero sus efectos no se quedarán ahí.

En principio, la borrasca acumulará alrededor de 80 litros por metro cuadrado en doce horas en A Coruña y Pontevedra, unas inclemencias que han activado la alerta naranja (riesgo importante) en esas zonas. También lloverá con intensidad en el resto de las provincias gallegas, donde se prevén niveles de 50 litros por metro cuadrado en doce horas.

Las rachas máximas de viento activarán mañana la alerta amarilla (riesgo para ciertas actividades) en comunidades aledañas, y soplarán con rachas de entre 80 y 90 kilómetros por hora en la comunidad gallega, en Asturias, Cantabria y amplias zonas de Castilla y León.

Del Campo ha explicado que el centro de la borrasca se situará al suroeste de Irlanda y desde su posición favorecerá la llegada de vientos muy fuertes al noroeste de la península, con rachas que pueden superar los 80-90 km/h en zonas sobre todo de montaña del norte peninsular y en puntos de la costa muy expuestos.

Las lluvias serán "abundantes" entre el miércoles y el jueves en la comunidad gallega, especialmente en el oeste de esta comunidad y en buena parte de las Comunidades Cantábricas, Castilla y León, centro peninsular, Extremadura y Andalucía Occidental.

El portavoz ha explicado que al tratarse de una borrasca atlántica, los vientos del suroeste llegarán bastante secos al área mediterránea, donde no va a llover y las temperaturas, superiores a las normales, marcarán hasta 34-35 grados en ciudades como Alicante o Murcia.

Por el contrario, en el resto de España el ambiente será desapacible, con valores algo más bajos de lo habitual para la época del año.

A partir del fin de semana, Aitor se retirará, pero tras su paso se abrirá "un pasillo de vientos del noroeste fríos", que se asentaran sobre la península durante el fin de semana, dejando temperaturas bajas y las primeras heladas nocturnas, ha concluido el portavoz.