Un joven mata a otro con un coche tras discutir en una cena de Navidad

El detenido arrolló a la víctima tras comprobar que le habían roto un espejo retrovisor a su vehículo · El conductor y su acompañante, que también está arrestado, se dieron a la fuga sin prestar auxilio al fallecido

La magistrada aclara el objeto de veredicto por el atropello del Store
La magistrada aclara el objeto de veredicto por el atropello del Store
Jorge Muñoz

13 de diciembre 2010 - 12:17

El joven de 26 años de edad, identificado como J.F.G.D., que fue detenido este domingo tras atropellar mortalmente a un varón de 31 años a las puertas de un salón de celebraciones del Polígono Store de la capital hispalense embistió "varias veces" con su vehículo a la víctima, según ha informado el jefe de la Brigada Provincial de Policía Judicial, Manuel Piedrabuena.

En este sentido, el responsable policial ha explicado que los hechos se produjeron en la madrugada de este domingo, cuando dos grupos de personas se encontraban cenando en unos salones ubicados en el Polígono Store y, en un momento dado, "ocurrió algún tipo de incidente verbal, alguna discusión que en principio no tenía mayor importancia", tras lo cual personas del grupo del fallecido salieron del salón "y quisieron romper o tocar el espejo retrovisor" del vehículo del presunto autor de los hechos.

De este modo, y según ha añadido Piedrabuena, personas del grupo del detenido "advirtieron que las personas que estaban tocando el coche formaban parte del grupo" con el que previamente habían discutido, e incluso alguna de estas personas "pensó que querían sustraerlo", momento en el que el dueño del turismo salió del salón y mantuvo una discusión con la víctima y sus compañeros, discusión durante la cual "hubo algunos golpes".

En declaraciones a los periodistas tras la inauguración de la comisaría de la Macarena, Manuel Piedrabuena ha puesto de manifiesto que, según las primeras investigaciones policiales, "hubo una insistencia" por parte del conductor detenido, pues "lo embistió sucesivas veces" con su vehículo tras mantener previamente una discusión "sin importancia" que degeneró en esta situación.

"Al final, el autor del atropello esperó junto a un amigo, y cuando el otro grupo abandonaba el salón aceleró el coche y fue hacia ellos", según ha proseguido el responsable policial, quien ha añadido, además, que, a consecuencia de la colisión, y además de la víctima, una persona sufrió lesiones graves en una cadera. Tras ello, tanto el conductor como el copiloto, también detenido, se dieron a la fuga.

Así todo, el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía se ha hecho cargo de la investigación del atropello mortal de Manuel Alías García, que tuvo lugar en la madrugada del domingo a las puertas de un establecimiento hostelero del Polígono Store, según han confirmado fuentes policiales.

Los dos jóvenes detenidos, el conductor del vehículo, J. F. G. D., de 26 años, y su acompañante, J. M. C. H., de 24, continúan esta mañana en las dependencias policiales, aunque podrían ser puestos a disposición judicial previsiblemente este martes, si los agentes encargados de la investigación culminan las diligencias que actualmente se siguen instruyendo. Las mismas fuentes consultadas no han podido precisar si los dos detenidos han prestado ya declaración ante los funcionarios de Homicidios.

Manuel Alías García, de 30 años, falleció en la madrugada de ayer tras ser atropellado intencionadamente por otro joven, J. F. G. D., de 26 años y que conducía bajo los efectos del alcohol, tras una absurda discusión relacionada con la rotura del espejo retrovisor de un coche. Tanto el conductor del vehículo como su acompañante, J. M. C. H., de 24 años, fueron detenidos por la Policía Nacional tras haberse dado a la fuga sin atender a la víctima, según confirmaron fuentes policiales.

Aunque el atropello se produjo sobre las 03:25 de la madrugada de ayer a las puertas de los salones de celebraciones Badía, ubicados en la calle Gramil del Polígono Store, el origen del suceso pudo deberse a un enfrentamiento previo entre dos grupos de jóvenes que asistían a las respectivas cenas de Navidad de sus empresas. Entre ambos grupos -uno de los cuales estaba formado por empleados de la empresa Feuvert, para la que trabajaba la víctima- se inició una disputa, por causas que no han trascendido dentro del mismo restaurante. A la salida del establecimiento, el altercado continuó porque el conductor detenido descubrió que alguien le había roto uno de los espejos retrovisores de su coche, un Seat Ibiza de color negro.

La reacción de J. F. G. D. consistió en arrancar el vehículo y, sin mediar palabra alguna, embestir a tres personas del grupo con el que se había enfrentado en el restaurante y al que culpaba de los daños del coche. Dos de estas personas consiguieron esquivar la brutal acometida del vehículo, pero la tercera, Manuel Alías García, fue alcanzado por el detenido y cayó al suelo con heridas mortales.

El conductor del Seat Ibiza, lejos de detener su vehículo, se dio a la fuga a gran velocidad por la ronda de circunvalación SE-30, que se encuentra a tan sólo unos metros del salón de celebraciones. Dos amigos de Manuel Alías se subieron a un coche e iniciaron la persecución del sospechoso, pero cuando había transcurrido poco tiempo sufrieron un accidente de tráfico en la misma SE-30, a la altura de la calle Parque de Grazalema.

El conductor del turismo fue detenido a las 6:30 horas en su domicilio de Triana y arrojó una tasa de alcohol de 0,38 miligramos por litro de aire espirado, lo que supera la legalmente autorizada. El otro detenido se entregó a la Policía tras conocer que el conductor había sido arrestado. Al conductor se le imputan delitos de homicidio, contra la seguridad vial, y omisión del deber de socorro, mientras que al copiloto sólo la denegación de auxilio a la víctima, tras haberse dado a la fuga del lugar del siniestro.

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