"La mejora de las condiciones laborales del profesorado afecta a la mejora de la educación"

Hijo de jornalero. Así se define Diego Molina cuando se le pregunta por sus orígenes. Licenciado en Filología Clásica y en Lengua y Literatura y firme defensor de la educación en igualdad, lleva 20 años desarrollando actividad sindical en CCOO, actualmente al frente de la Federación de Enseñanza de Andalucía, aunque tiene su plaza en el Instituto Federico García Lorca de Churriana de la Vega en Granada, capital en la que vive. El próximo 4 de diciembre se enfrenta a las elecciones sindicales del profesorado de la educación pública lleno de ilusión y convencido de que el profesorado andaluz apoyará mayoritariamente el sindicalismo de clase de CCOO.

-¿Está poco valorada la profesión del docente?

-Difiere mucho la valoración que nuestra sociedad realiza de su profesorado si la comparamos con otros países europeos. El profesorado destina un gran esfuerzo a la labor docente, no sólo a dar clase sino, entre otras cuestiones, a su preparación o al seguimiento de nuestro

alumnado, tareas que son realmente agotadoras. Esta dedicación profesional es la que

permitió que CCOO acordar en solitario en el año 91 la jubilación del profesorado a los 60

años, jubilación que, a pesar de los recortes, aún sigue disfrutando. Pero es necesario avanzar

en el reconocimiento social del profesorado y este reconocimiento debe realizarse en primera

instancia por las Administraciones Públicas.

-¿Cuáles son los principales problemas del profesorado andaluz?

-La educación andaluza necesita incrementar el número de docentes y reducir las horas lectivas

para dar respuesta a la diversidad de nuestro alumnado. Mejorar los niveles de éxito escolar

requiere disponer de profesorado para apoyo educativo, para desdobles de grupos o para

mejorar la orientación escolar y la acción tutorial. Debe reducirse la ratio a 20 escolares,

iniciándose con la educación infantil para alcanzar la educación primaria y el resto de niveles

educativos. Andalucía necesita acuerdos de plantillas como el alcanzado en solitario por CCOO

para la educación infantil con el llamado cupo 14. Es importante consolidar los puestos del profesorado en los centros educativos a través de los concursos de traslados. En el caso del profesorado interino CCOO está trabajando con el Ministerio de Educación por un modelo transitorio de acceso a la función pública docente que cuente con pruebas no excluyentes y que valore al máximo la experiencia previa tal como los

modelos alcanzados por CCOO para el profesorado interino en los años 91 y 2007.

-¿Se pueden revertir los recortes de los últimos años?

-Sin duda alguna. No es sólo posible sino que deben revertirse. Aunque no es fácil. Los últimos

acuerdos alcanzados el pasado verano en la Mesa General Estatal de la Función Pública en la

que CCOO es el sindicato mayoritario, han sentado las bases para esta reversión. Hemos

acordado un incremento salarial para los empleados públicos de un 8% progresivo hasta 2020,

la supresión de las retenciones durante las bajas por enfermedad, la recuperación de las 18

horas lectivas semanales para el profesorado de Secundaria, FP y Régimen Especial o el

incrementado de la oferta de empleo para reducir la tasa de interinidad al 8% en 2020 entre

otras cuestiones. Pero queda mucho aún en que avanzar.

-¿Cuál es la principal reivindicación en el ámbito educativo en la que trabaja actualmente

CCOO?

-En lo que respecta a las condiciones laborales del profesorado, CCOO está trabajando por la

equiparación retributiva de todo el profesorado. Los docentes pertenecemos a un cuerpo

estatal. No es comprensible que la comunidad autónoma en la que realices tu trabajo

determine tu salario teniendo en cuenta que todo el profesorado realiza un trabajo similar.

Además es necesario erradicar todo el empleo precario y externalizado que se desarrolla en los

centros educativos andaluces con los trabajadores no docentes cuyas labores de apoyo a la

tarea del profesorado es fundamental. Debemos avanzar igualmente en la consolidación del

empleo ocupado por profesorado interino facilitando su ingreso a la función pública docente.

-La participación en las anteriores elecciones sindicales fue baja. ¿Por qué necesita el profesorado afiliarse a un sindicato en estos momentos?

-En nuestra sociedad globalizada, en la que el poder económico ataca como

nunca a la clase trabajadora, es cuando más sentido tiene el sindicalismo de clase. El

profesorado es un eslabón importantísimo para el futuro de nuestra sociedad. La mejora de

sus condiciones laborales afecta a la mejora de la educación y de este modo al estado de

bienestar de toda la población.