Dos semanas para cerrar las candidaturas por Cádiz para el 19-J

Dos semanas tienen por delante los partidos políticos para confeccionar las candidaturas con las que concurrirán a las elecciones andaluzas del próximo 19 de junio por la provincia de Cádiz. Y menos tiempo, apenas ocho días, son los que faltan para que se sellen las coaliciones electorales que concurrirán a estos comicios. Y salvo el PSOE, que ha cerrado esta semana su lista al Parlamento andaluz, todo lo demás son incógnitas porque el resto de fuerzas políticas aún no han mostrado sus cartas para estos comicios adelantados.

Las dos fechas iniciales están claras: las coaliciones electorales que se conformen hay que comunicarlas oficialmente el viernes 6 de mayo, y las candidaturas hay que presentarlas ante la Junta Electoral entre el miércoles 11 y el lunes 16. Hasta ahora sólo el PSOE ha hecho su tarea en la provincia, cerrando una candidatura que estará encabezada por la actual presidenta de la Diputación, Irene García, y que tendrá en los puestos de salida al roteño Rafael Márquez en el número dos, a la algecireña Rocío Arrabal en el tres y al isleño Fernando López Gil en el cuarto. Esto conllevará la jubilación político de dos destacados dirigentes socialistas como son Manuel Jiménez Barrios y Juan Cornejo, la salida de la Cámara andaluza de Araceli Maese, hasta hace poco secretaria de Organización del partido en la provincia, y el posible adiós también de Noelia Ruiz, ex alcaldesa de Torre Alháquime, parlamentaria andaluza en la legislatura recién finalizada y que ahora ocupará el quinto puesto de la lista, con pocas opciones de repetir escaño. En los comicios de diciembre de 2018el PSOE ganó en la provincia logrando cuatro parlamentarios por Cádiz. Este partido confía ahora en, como mínimo, repetir ese resultado.

El partido que ha asumido la Presidencia de la Junta en estos tres años y medio, el PP, tiene que tomar una decisión muy importante en pocos días: la inclusión o no en los puestos de salida de su candidatura de Ana Mestre, actual delegada del Gobierno andaluz en Cádiz. Y es que si da este paso y se integra en la lista, Mestre tendría que dimitir con carácter inmediato, de acuerdo con la Ley Electoral.

El PP aún no ha soltado prenda y es muy posible que no lo haga hasta el día anterior a tener que presentar la lista. Pero los indicios invitan a pensar que sí, que Ana Mestre irá en esa candidatura. De ser así, el nombre que más suena para relevarla al frente de la Junta es Mercedes Colombo, delegada territorial de Fomento y Cultura.

Otra cosa sería determinar si Ana Maestre iría en el número uno de la lista o si, como parece más probable, queda incluida en el dos, dejando la cabecera a Bruno García, actual presidente provincial del PP y parlamentario andaluz. En estos puestos de salida se da por hecho la continuidad de la algecireña Pilar Pintor, que iría en el puesto tres o cuatro, dependiendo de quién ocupa el primer puesto y teniendo en cuenta que todas las candidaturas tienen que ser cremallera, y tampoco se puede descartar que siga siendo de la partida Alfonso Candón. En 2018 el PP tuvo un mal resultado, quedando como cuarta fuerza política en la provincia y logrando tres escaños. Ahora este partido confía en amarrar cuatro.

En las últimas andaluzas el PP sufrió un sorpasso por parte de Ciudadanos, que fue el segundo partido más votado en la provincia y a menos de 15.000 votos de alcanzar al PSOE. Con todas las encuestas en contra, el partido naranja sólo sabe que su candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía será de nuevo el sanluqueño Juan Marín. Queda por saber si el aún vicepresidente del Gobierno andaluz concurre de nuevo por Sevilla, como sucedió en 2015 y 2018, o si se decanta ahora por encabezar la lista de Ciudadanos por Cádiz. Si se decanta por la primera opción no extrañaría ver en la cabecera gaditana a Carlos Pérez, actual coordinador provincial del partido, concejal en Jerez y ex senador. Ciudadanos sacó tres escaños por Cádiz y todo apunta a que sería un milagro si ahora amarrara al menos uno.

Pero si las encuestas no sonríen a Ciudadanos, sucede todo lo contrario con Vox. El partido de Abascal ya sorprendió en las andaluzas de 2018 logrando dos parlamentarios por Cádiz (Manuel Gavira y Ángela Mulas) y ahora ven factible, como mínimo, duplicar ese resultado. Nada se sabe de su lista electoral, entre otras cosas porque falta aún que este partido dictamine quién será su candidato a presidir la Junta. Todo apunta a que será Macarena Olona, pero ni siquiera eso está cerrado todavía.

Y a la izquierda del PSOE hay un galimatías que debería empezar a clarificarse antes de una semana, cuando se conozcan las coaliciones que se habrán logrado conformar. Ahora mismo hay tres bloques (Unidas Podemos, la unión de Más País y AxSí, y Adelante Andalucía), aunque todo apunta a que los dos primeros terminarán uniéndose, quedándose sola la corriente que tendrá como número uno a Teresa Rodríguez. A falta de confirmación oficial, se da por hecho que la dirigente anticapitalista liderará la lista por Cádiz –en 2018 lo hizo por Málaga– ya que parece más factible que pueda lograr un escaño por esta provincia, algo para lo que precisaría entre 30.000 ó 35.000 votos, dependiendo de la participación final.

Y en la otra confluencia de izquierdas ya se sabe que el acuerdo entre Podemos e Izquierda Unida está cerrado. Falta por saber si hay alianza con el partido de Errejón y con los andalucistas y falta también por decidir quién será su candidato a presidir la Junta. En las filas de Podemos el mejor colocado para ocupar ese puesto será el guardia civil de San Fernando Juan Antonio Delgado. Pero se desconoce si IU aceptará esta opción o si peleará por poner a alguno de los suyos, como su coordinador regional, Toni Valero, o la parlamentaria algecireña Inmaculada Nieto. En cualquier caso, tampoco se sabe aún si Delgado concurriría por Cádiz o por Sevilla y tampoco si será alguien de Podemos o de IU quien tomará la cabecera por la provincia gaditana.

En 2018, antes de la ruptura en Podemos, Adelante Andalucía logró tres parlamentarios por Cádiz. Ahora la confluencia de Podemos e IU confía en repetir ese resultado, aunque seguro que no le harían ascos a conseguir sólo dos.