El voto oculto frustra las expectativas de Javier Arenas en los municipios

La espita que el Partido Popular pareció haber colocado en la provincia en las elecciones de hace cuatro meses, cuando pasó de ganar en sólo dos municipios en las autonómicas y generales de 2008 -Espartinas y Tomares, además de en la capital- a hacerlo en 17, ha sido puro espejismo. El partido de Javier Arenas, que confiaba en mejorar en las ciudades medias para lograr la mayoría absoluta y evitar que un pacto entre PSOE e IU le dejen sin el Gobierno, no consiguió ayer ni siquiera consolidar esos resultados históricos del pasado 20 de noviembre y hasta retrocedió, porcentualmente, en seis de esos municipios, en los que el PSOE se recuperó como lista más votada pese a la pérdida sangrante de sufragios.

Algunos tienen más de 20.000 habitantes, el grupo de localidades donde se centraba la batalla. Es el caso de Mairena del Alcor (donde el PP había ganado también en las municipales) y Los Palacios, donde, aunque a años luz del desgaste socialista (6.431 votos menos que en las autonómicas de 2008; 1.318 menos que el 20-N), el PP también ha sido castigado: 200 votos menos que en las anteriores autonómicas y 2.600 menos que cuando lo que estaba en lid era el Gobierno de la nación. El PP tampoco ha logrado mantenerse como el más votado en Villanueva del Ariscal, Sanlúcar la Mayor y Carrión de los Céspedes, en los que se impuso el 20-N. Todos los municipios en los que ha refrendado su triunfo son del Aljarafe, con la excepción de Écija, donde el PP parece haber aglutinado un voto conservador que antes se llevaba en parte el PA.

El jarro de agua fría para la formación que preside en Sevilla José Luis Sanz se acrecienta con lo ocurrido en Dos Hermanas y Alcalá de Guadaíra, graneros de votos a nivel andaluz, ciudades urbanas y metropolitanas donde, en teoría, el PP suele convencer con más facilidad, pero que se le siguen resistiendo en este caso.

En la primera, respecto a las generales, aumentaron de 3.000 a 6.800 los sufragios que separan al PP del PSOE y Arenas sólo logró convencer a 122 votantes más que hace cuatro años. Los más de 11.000 votos que perdió el PSOE se fueron a la abstención, a IU (2.461 más) y a UPyD (que pasó de 732 a 3.178). En Alcalá, la diferencia con el PSOE se quedó en las autonómicas en apenas 300 votos, pero ayer pasaron a ser más de 3.500. El PP sólo logra 159 votos más ante un PSOE que pierde casi 6.500, pero que de nuevo se van a IU y UPyD, que suben más de 1.300 en ambos casos.

Es decir, el voto hastiado de la gestión y los escándalos socialistas -que aun así sigue siendo la fuerza más votada en 92 de los 105 municipios- se ha ido a otras formaciones de izquierdas, no al PP, en una tendencia generalizada en la práctica totalidad de los municipios sevillanos, aunque aún hay que calibrar en qué medida se debe a un posible rechazo hacia Javier Arenas, a la reforma laboral y los recortes planteados por Mariano Rajoy o al miedo al cambio alentado durante la campaña.

Y es que, cuando se suponía que el viento soplaba a favor del candidato popular a la Presidencia -el caso de los ERE, la división en el seno del PSOE sevillano, la pujanza del PP a nivel nacional-, éste ha retrocedido incluso en votos con respecto a las autonómicas de 2008 en algunos casos. Además de en Los Palacios, ha ocurrido en otros municipios de peso como Utrera (donde el PSOE pierde 5.000 votos, que van a parar también a IU y UPyD); en Morón, donde gobernó varios mandatos en el Ayuntamiento, pero obtiene 1.297 sufragios menos que hace cuatro años. También baja en votos en Arahal, La Algaba, Almensilla, Cantillana y Guadalcanal (dos municipios donde, por cierto, ganó en las locales de 2011), Lora del Río, Marchena y otras pequeñas poblaciones, como El Saucejo, Aguadulce, El Castillo de las Guardas, El Coronil o El Garrobo. En Bollullos sigue como lista más votada, pero con 20 sufragios menos que hace cuatro años, una cantidad insignificante pero que revela que los populares, aún habiendo crecido -en las autonómicas de 2008 sólo ganaron en Tomares, Espartinas y Sevilla- no han logrado la movilización deseada y necesaria para cumplir con los objetivos marcados.

IU sube en la práctica totalidad de los municipios y en muchos casos duplica el número de votos que obtuvo en las elecciones autonómicas del año 2008, que se celebraron conjuntamente con las generales en las que José Luis Rodríguez Zapatero logró la mayoría absoluta. No obstante, la formación sólo vuelve a ser la lista más votada en Marinaleda, la población de la que es alcalde desde las primeras elecciones de la Democracia Juan Manuel Sánchez Gordillo.