"O hay Gobierno de cambio o Gobierno socialcomunista"
Juanma Moreno | Presidente del PP-A
El candidato del PP andaluz a las elecciones del 2 de diciembre tacha de "timo" que los votantes no sepan cuál es la política de pactos del resto de partidos
Ésta es la primera vez que el PP concurre a unas elecciones andaluzas con un socio factible de gobierno: Ciudadanos, con el que podría entrar en la Junta si ambos partidos sumasen los 55 parlamentarios de la mayoría absoluta. Juanma Moreno se presenta por segunda vez a estos comicios del 2 de diciembre. La vez anterior, casi no había aterrizado cuando Susana Díaz adelantó la cita.
-Usted ha ido a los pinares de Puebla del Río a emular la foto de la tortilla, aquella que se hicieron los dirigentes del socialismo andaluz en 1974. Y ha hablado de reivindicar el espíritu de aquel encuentro. ¿Qué espíritu es?
-Hubo un núcleo de socialista en aquella época que ilusionó y que entusiasmó, y era un PSOE que creía en España y que tenía la honestidad por bandera, y ese PSOE ha ido degenerando hasta nuestros días. Tanto el que tenemos en España como en Andalucía, capaces de pactar con neocomunistas y extremistas, y con los independentistas que están en la cárcel. Se trataba de ver ese deterioro de un proyecto que, en efecto, fue ilusionante.
-¿No hubiese sido mejor haber reivindicado algún acto del centro y derecha andaluz?
-Estábamos hablando de quienes han tenido el monopolio del poder en Andalucía, se trataba de ver eso.
-¿No arriesga usted demasiado en esta campaña con este tipo de escenificaciones? Me refiero a esto último y a la rueda de prensa que dio en las puertas del Don Angelo.
-No. A veces hay que alzar la voz, llamar la atención sobre lo que sucede en Andalucía y lo hacemos buscando símbolos del deterioro del poder. Esto es la comunicación, y hemos tomado decisiones que algunos han criticado, pero que yo comparto, porque al final se ha hablado del Don Angelo y de la foto de la tortilla. El Gobierno socialista siempre ha intentado ahogar la voz del PP, no tenemos ni los mismos espacios ni los mismos recursos, esto es como David contra Goliat. De lo que se trata es de que los ciudadanos vean que Andalucía necesita un cambio, y el cambio es que Andalucía funcione.
-Su partido está personado en el caso del uso de las tarjetas de la Faffe en prostíbulos, como el Don Angelo. ¿Sabe usted qué personas acompañaban el día de esa fiesta al gerente de la Faffe?
-No tengo constancia de esto, no sé si está en la documentación, porque no llevo la dirección jurídica de ese caso.
-Usted es el único candidato que nos ha dicho en esta campaña con quién quiere pactar, que es con Ciudadanos, mientras los otros nos cuentan que no pactarán con nadie.
-Bueno, digo cuál es el único con el que puedo pactar. Los electores tienen el derecho de saber cuáles son los posibles pactos electorales, porque si no, esto es un timo. Me gustaría que desde el PSOE se dijese que se va a pactar con Podemos, porque es su única opción. Todos tenemos que poner las cartas boca arriba. El elector debe saber a dónde va su voto. Pongamos el ejemplo de las anteriores elecciones. Hubo mucha gente de buena fe que votó a Ciudadanos porque creía que era el cambio, y después pactó con el PSOE, y Susana Díaz ha disfrutado de una mayoría socialista con Ciudadanos. Ha sido el socio más sumiso que el PSOE ha tenido en su historia.
-¿Y ahora?
-Lo decimos claro. Podemos ya ha alcanzado un acuerdo con el PSOE a nivel nacional, y sabemos que en Andalucía terminarán pactando. Nosotros lo que decimos es que no vamos a pactar ni con Podemos ni con el PSOE; somos el único partido que no ha pactado en Andalucía con los socialistas, ha pactado el PA, IU y Ciudadanos. Con la única fuerza con la que nos podríamos entender es con Ciudadanos, siempre que hubiese una mayoría aritmética y un acuerdo para regeneración y cambio.
-¿Qué ocurrirá si PP y Ciudadanos no suman los 55 escaños? ¿Augura un bloqueo? ¿Un pacto de izquierdas?
-Todo parece indicar que en Andalucía pasará lo que está ocurriendo a nivel nacional, donde el señor Pablo Iglesias va de vicepresidente del Gobierno de Pedro Sánchez. En Andalucía, o hay alternativa de cambio o hay un Gobierno socialcomunista con Podemos. Ciudadanos no sé lo que hará, pero teniendo después las elecciones municipales, autonómicas y europeas, no creo que Rivera se atreva a pactar con el PSOE.
-¿Cree que si pactará con el PP?
-Sí.
-Y usted también pactaría con Ciudadanos, tanto si es segundo como si es tercero.
-Es que no se me pasa por la cabeza, por muchas razones Ciudadanos no adelantará al PP. No hay encuestas, están a cinco puntos, es verdad que en política todo es posible, pero es que están a mucha distancia.
-¿Le gusta la fórmula de Gobierno de coalición?
-De eso ya hablaríamos, pero yo salgo a ganar porque creo que es posible. En las pasadas elecciones generales, hubo casi 1.400.000 andaluces que eligieron la papeleta del PP, ¿por qué no va a ocurrir ahora? Y ahora hay más razones que entonces. Aspiro a que todas esas personas repitan.
-Pero después se dan situaciones paradójicas, la oposición ha sido mayoritaria en esta legislatura, pero no fue capaz de unirse para elegir a un presidente no socialista del Parlamento andaluz. Lo último fue la elección de una socialista para presidir la comisión de investigación de la Faffe.
-Es que no me puedo poner de acuerdo con quien no quiere, y Podemos e IU no han querido ponerse de acuerdo con nosotros. En ningún tema.
-¿En el caso de la Faffe tampoco?
-Tampoco, el PP fue el que registró la propuesta de comisión de investigación y lo normal hubiese sido que el presidente fuera nuestro. Es una tradición. Pero la sorpresa es que Podemos no nos votó, aunque nos dijo lo contrario y que Ciudadanos se abstuvo.
-Usted propone una "revolución fiscal" para Andalucía. ¿Eso qué es? ¿Bajar los impuestos todo lo posible?
-Madrid es la comunidad más próspera, va a adelantar a Cataluña en cuanto a PIB. Ha ido de menos a más, porque, entre otras razones, acapara buena parte de la inversión extranjera en España, y cuando preguntamos por las razones, se nos contesta que es por sus ventajas fiscales. ¿Qué vamos a hacer en Andalucía? Vamos a tener, exactamente, el mismo modelo fiscal que Madrid. Evidentemente, no será en un mes, pero sí a lo largo de la legislatura, de tal modo que Andalucía pueda competir de igual a igual con Madrid, Navarra o el País Vasco.
-Pero Madrid se beneficia básicamente del efecto de su capitalidad.
-Sí, pero nosotros tenemos dos millones más de habitantes, mil kilómetros de costa y 87.000 kilómetros cuadrados, yo quiero mucho a Madrid, pero la comparación salta.
-Lo que quiero decir es que Madrid se puede permitir rebajar los impuestos porque sus ingresos suben a causa de la centralidad.
-No, no es sólo eso, recibe porque baja impuestos.
-¿Cuáles bajaría en Andalucía?
-Todos. Sucesiones desparece y los hacemos hasta 300.000 euros para segundo grado. El impuesto de trasmisiones y actos jurídicos lo bajamos y lo ponemos como en Madrid. Bajamos el tramo autonómico del IRPF, y las tasas y precios públicos. Se trata de enviarle al inversor el mensaje de que aquí tiene una comunidad que es como Portugal y que puede invertir. Es que Andalucía sólo recibe el 1,7% de la inversión extranjera. Madrid tiene más ingresos que Andalucía, con menos personas e ingresos más bajos. ¿Por qué? Y vamos a reducir los excesos legislativos, porque el segundo factor que obstaculiza la inversión es la burocracia.
-También propone una limitación de mandatos de dos legislaturas para presidentes de la Junta y consejeros, pero no incluye a los alcaldes.
-Porque los alcaldes tienen la peculiaridad del vínculo personal con su municipio, de modo que muchas veces se vota a la persona, no a los partidos. Imagine en los pueblos, que hasta cuesta trabajo buscar ese capital humano, no lo podemos desaprovechar. Si hubiéramos tenido una limitación de mandatos, no habríamos tenido los 20 años de Manuel Chaves con todas sus consecuencias. Es que, al final, se vician, somos humanos, es que hay gente que lleva con cargos en la Junta cerca de 40 años, es que se creen que el despacho es suyo. Y son cargos eventuales a dedo.
-¿Sabemos cuántos altos cargos y personas de confianza hay en la Junta?
-Eso es para llamar al programa de Iker Jiménez, porque no hay forma de averiguarlo, a pesar de que lo pedimos con insistencia. No lo sé y soy el líder de la oposición. Ellos han creado una arquitectura institucional que es una maraña de la que cuelgan agencias y empresas, de modo que te dicen cuántos hay en una consejería, pero no en las instituciones dependientes. Queremos saber cuántos son, cuánto cobran, cómo han entrado y a qué se dedican. Es el ejemplo de la Faffe, que había 2.800 contratos irregulares.
-¿Qué haría la primera semana si fuese presidente de la Junta?
-Eliminar el impuesto de sucesiones, me comprometí con unas personas y eso es lo que haría.
-Acaba de aprobar las listas del PP a las elecciones del 2 de diciembre. Habrá sido complicado, ha metido a bastantes casadistas.
-Han sido complicadas, pero como las anteriores y como serán las siguientes. Tenemos que conjugar las visiones provinciales con la regional y ésta con la nacional.
-¿Están contentos los casadistas?
-Sí, y los demás también, las listas han sido muy inclusivas, con independencia de que haya alguien molesto, que además es normal. He buscado gente con experiencia y capacidad, hay mucha variedad, desde un ex ministro como Juan Ignacio Zoido, que va por Sevilla, y al que yo agradezco su esfuerzo, hasta personas jóvenes como el presidente de Nuevas Generaciones por Granada.
-¿Zoido sirve para taponar Sevilla, donde Ciudadanos está muy fuerte?
-En Sevilla va a haber una lucha fuerte, y la capital, más. De todos los posibles candidatos, Juan Ignacio era el mejor por haber sido alcalde, por haber sido ministro, por ser una figura reconocida, era el más atractivo como cabeza de cartel. Como en Córdoba José Antonio Nieto, ex alcalde que, como Zoido, ganó las últimas elecciones en su ciudad. Yo quiero gente que movilice votos.
-¿A usted le preparan el banquillo por si no gobierna?
-Eso lo llevan diciendo desde el principio. También se lo hacían a José María Aznar desde el minuto uno, antes de ser presidente y a Rajoy, es inherente a la política.
También te puede interesar