Juanma Moreno confía en la mayoría absoluta, solo o con Ciudadanos
El presidente de la Junta se encuentra con Inés Arrimadas en Granada, donde sostiene que "Vox no va a ser necesario"
Abascal le da un giro a la campaña estratégico de Olona, con el desembarco de referentes nacionales de su partido
La advertencia de Vox al PP de que no le dará ningún apoyo a Juanma Moreno si le hicieran falta votos para su investidura no causa una excesiva preocupación en el cuartel general del presidente de la Junta. Por dos motivos: porque repetir unas elecciones supondría un riesgo para el que el causante de consecuencias muy graves -hay que recordar el ejemplo de Albert Rivera en las segundas generales de 2019- y porque si sólo le faltasen cinco abstenciones, la candidata Macarena Olona carecería de fuerzas para exigir la vicepresidencia. PP y Vox tendrían que llegar a otro tipo de acuerdo.
Ahora bien, la confianza del PP ha vuelto ahora hacia su aliado más leal, a Juan Marín y a Ciudadanos. Uno o dos escaños supondrían materializar sillones similares a los del PP y evitaría inutilizar miles de papeletas, al menos, en esas provincias donde hubiera un escaño naranja. Juanma Moreno e Inés Arrimadas ha coincido este miércoles en Granada, donde se celebra cabalgata de la Tarasca, fiesta previa al Corpus." "Si votas a Ciudadanos, tienes el mismo Gobierno que hay ahora. Si votas al PP, te vas a encontrar a Olona de vicepresidenta", ha señalado Arrimadas.
En la misma ciudad, el presidente de la Junta ha vuelto a insistir en que el "voto últil" para no tener a Vox en el Gobierno es el del PP. Por primera vez en esta campaña, Ciudadanos ha publicitado un video crítico con el propio Moreno, de quien advierte que terminará como Alfonso Fernández Mañueco, el presidente de la Junta de Castilla y León, quien se comprometió a no pactar con el partido de Santiago Abascal.
"Espero no negociar nada absolutamente con Vox", ha dicho en Granada. Y ha seguido: "Creo que ese objetivo es alcanzable, y estoy convencido de que Vox no va a ser necesario". El informe gestual de las caritas muestra que los sondeos que Moreno recibe de modo diario le deben dejar muy cerca de los 55 escaños.
El líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha vuelto a Andalucía para hacer campaña estos últimos días. Lo que sostiene es que Vox ha sido el único argumento de la campaña de los socialistas. "Si al PSOE le molesta tanto Vox, que lo acredite", ha asegurado en Vícar. Al ser preguntado qué hará el PP si necesita los escaños de Olona ha acudido a la ironía gallega: "Entiendo yo que el PSOE nos dará una solución. Si el que gana es el PP y el PSOE tiene posibilidad de apoyar la investidura, ya no hay ningún comentario al respecto".
En todas las entrevistas, Juanma Moreno está subrayando que no quiere un Gobierno de líos, que descarta a Vox, al menos en principio, por lo que está pidiendo de forma abierta el apoyo del centro izquierda. Su objetivo es que parte del voto progresista entendiese que estas elecciones andaluzas son como una segunda vuelta de las presidenciales francesas. La participación de Giorgia Meloni, la líder de Hermanos de Italia, en un mitin de Vox en Marbella ha corrido por las redes. Meloni es una admiradora de Musolini, Orban y Trump, y su alegato contra las familias LGTBI, ha terminado por alertar a quienes se había acostumbrado a la presencia de Vox.
El líder del partido, Santiago Abascal, ha tenido que darle un giro a la campaña de Olona. Desde este martes hasta el viernes, participará en mítines en las municipios donde es más fuerte, como El Ejido, Lucena y Algeciras. Es significativo que al llegar a Lucena la comitiva de Vox quien fuera recibido al grito de "presidente, presidente" fuera Abascal. Olona no ha protagonizado ningún mitin en el que no estuviese acompañada por alguno de los referentes nacionales.
El mensaje sigue siendo claro: sólo habrá apoyo a cambio de una coalición, como en Castilla y León. Abascal cerrará en Sevilla junto a la aspirante a la Junta y a Ortega Lara. En Lucena estuvo con Rocío Monasterio, y tanto Iván Espinosa de los Monteros como Ortega Smith tienen programados actos en la comunidad hasta el viernes.
El PP lucha en estos momentos contra dos efectos: la euforia de los suyos por una victoria previsible, además de la abstención que pueda causar el fin de semana y la ola de calor. Juanma Moreno
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