Juan Espadas tira de los sindicatos

Comisiones y UGT, atacados por Vox, pedirán el voto para partidos de izquierdas

Adelante Andalucía no podrá participar en los debates de televisión

Juan Espadas, este martes con la secretaria general de CCOO en Andalucía, Nuria lópez. / Joaquín Corchero/Ep

El socialista Juan Espadas está haciendo la campaña más clásica, mucho coche y bastante agenda. Vox la más novedosa de todos, ni hay caravana ni convocatorias a los medios de comunicación, sólo guasap -la gran herramienta del 19 de junio- videos propios. Pero Espadas ha recurrido a unos aliados que ya jugaron un importante papel en las elecciones autonómicas de 2012: los sindicatos de clases, UGT y Comisiones Obreras. El precedente es bien claro: el consejero de Empleo de Castilla y León, de Vox, Mariano Veganzones, ha roto el diálogo social en esta comunidad, bajo la acusación de que las centrales son unas organizaciones corruptas.

Espadas ha acusado al Gobierno de Moreno de que en Andalucía haya aumentado la brecha de pobreza con le resto de España, que es la conclusión que se extrae del informe del Instituto Nacional de Estadística (INE), aunque los datos aún son de 2019. "Si lo que pretende con su actitud es desmovilizar y una baja participación, les aseguro que no lo va a conseguir. Vamos a dar a los andaluces muchas razones para ir a votar y para que decidan un cambio de gobierno", ha indicado el candidato socialista. Los sindicatos pueden ser una de las claves de la movilización.

El potencial aliado del PP, Vox, ha declarado la guerra a Comisiones y UGT, a quienes llama "sindicatos de las mariscadas"

Vox tiene su propio sindicato, Solidaridad, que dirige el parlamentario almeriense Rodrigo Alonso, aunque su fuerza en el mundo del trabajo es mínima. Es común en muchos partidos nacional populistas que constituyan sindicatos como oposición a las centrales tradicionales, que suelen ser organizaciones de clase. Macarena Olona, candidata a la Junta, suele referirse a Comisiones y UGT como "sindicatos de las mariscadas", a la vez que sitúa a éstos como defensores de las "élites" y los "poderosos". es otra característica de los populismos, de izquierdas y derecha, el de alzarse contra las supuestas élites o contra la casta, que fue el término empleado con Podemos.

Así que el acercamiento de Espadas a los dos sindicatos de izquierdas no es baladí. Comisiones, por ejemplo, es una de las mayores organizaciones de Andalucía, con terminales en casi todas las empresas y administraciones, y casi lo mismo sucede con UGT. A esto hay que añadir que la anterior líder socialista, Susana Díaz, no mantuvo una buena relación, en especial, con UGT, el sindicato hermano del PSOE.

Espadas se ha reunido este martes con la dirección de Comisiones, que dirige Nuria López, uno de los valores más apreciados de la izquierda andaluz. Y el lunes anterior, antes de meterse en un tour intenso por toda la provincia de Cádiz, el candidato socialista se encontró con la de UGT, dirigida por Carmen Castilla. Ambas han solicitado el voto para partidos de izquierdas que defiendan los derechos de los trabajadores.

Espadas sostiene que el Gobierno de Moreno carece de políticas industriales

Juan Espadas ha mantenido que todas las mejoras que han logrado los trabajadores en estos últimos meses, y que se están notando en las cifras de desempleo, así como en la subida de los contratos indefinidos, se deben a reformas del Gobierno de Pedro Sánchez. "El Gobierno andaluz -ha indicado Espadas- no tiene proyecto para Andalucía, su única deriva es oponerse, criticar y confrontar con el Gobierno central, y todos los avances de los trabajadores se deben a sus reformas, como la laboral, reformas a la que el PP se ha opuesto".

Otras de las críticas de Espadas es que el Ejecutivo de Juanma Moreno carece de política industrial. "Ni tiene ni se ha interesado por ninguno de los problemas de las grandes industrias", ha indicado Espadas en referencia a casos como el de Airbus, que ha cerrado una de sus plantas en la Bahía de Cádiz.

En el año 2012, fueron los sindicatos los que lograron que Javier Arenas, candidato del PP, no lograse la mayoría absoluta para gobernar la Junta. Es verdad que, hacía unos meses, había comenzado a gobernar Mariano Rajoy, y una de sus primeras actuaciones fue la reforma laboral que lideró la onubense Fátima Báñez. Aquello fue letal para una victoria que estaba ganada antes de que los populares llegasen a la Moncloa.

En esta ocasión, en panorama es distinto. Los socialistas gobiernan la nación, y Juanma Moreno no se ha caracterizado en Andalucía pos estar en contra del diálogo social ni de los sindicatos clásicos, pero Vox es un aliado potencial que le ha declarado la guerra a UGT y Comisiones. La primera experiencia de gobierno del partido de Abascal, la de Castilla y León, indica hasta qué punto está dispuesto este partido a forzar la ruptura con los sindicatos.

Los partidos de izquierdas se han sumado, en las últimas horas, a culpar al Gobierno de Juanma Moreno de los malos datos de Andalucía que el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha aportado sobre la comunidad. Las poblaciones con menor renta de España, así como las de mayor desempleo, se encuentran en Andalucía. Los datos de renta, no obstante, son de 2019, pero la comunidad lidera los peores puestos: el desempleo más alto es el de Linares, la Línea, Alcalá de Guadaíra, Jerez y Granada. Los municipios con mejor renta son Sanlúcar, La Línea, Fuengirola y Chiclana, entre las poblaciones con mayor número de habitantes. Sin el sesgo de población, los más pobres también son andaluces: Níjar, Vícar, Los Palacios y Barbate.

Para Teresa Rodríguez, candidata de Adelante Andalucía, estos datos "destrozan el castillo de naipes del supuesto milagro andaluz" que vende Juanma Moreno.

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