Una lucha reñida por la derecha con los socialistas marcando distancias
La batalla por Granada
El PSOE defiende su gestión sanitaria y el PP repite el lema de “recuperar” la Alhambra y la Sierra
El PSOE mantiene su mando en plaza, el PP se descalabra, Ciudadanos salta dos escalones hacia arriba y Adelante Andalucía se estanca. Este sería, según la encuesta de Metroscopia para el Grupo Joly, el vaticinio del 2-D en Granada.
Pero, a una semana de ese polígrafo de la verdad en forma de urnas, los sondeos empiezan ya a perder valor y es cuando los partidos intentan su trucos finales en busca de arañar unos votos y hasta un escaño o de no perder más comba.
Ese margen que da vértigo y más en una provincia como Granada donde el Partido Popular se está jugando perder su hegemonía histórica como segunda fuerza en pos del avance naranja, y donde la izquierda que encarna Adelante Andalucía está ante la tesitura de perder parte del camino recorrido.
De hecho, es la única provincia en la que, según la encuesta, la suma de Podemos con Izquierda Unida no se traduciría en más votos. Ese estancamiento del ala más izquierdista le vendría bien al PSOE, que paradójicamente está volcando su campaña en Granada en el aspecto sanitario a través del proyecto global del Parque Tecnológico de la Salud.
El PSOE se centra en la Salud
Los socialistas han hecho del defecto una virtud, puesto que desde la crisis sanitaria que se originó en Granada han revertido esta lucha apelando a la cuestión de la Salud, así en mayúsculas, como su gran bandera en esta batalla del 2-D.
Tanto es así, que Susana Díaz quiso reconciliarse con una de sus provincias problemáticas en la legislatura’ y abrir la campaña en Granada desafiando a sus más acérrimos adversarios.
El PP, sin embargo, está optando por un discurso histórico y se aferra al viejo mantra de que hay que recuperar la Alhambra y Sierra Nevada para los granadinos. Otra baza que han jugado los populares es la del desembarco de figuras de su partido a nivel nacional. De hecho, Pablo Casado ha estado más veces en los últimos meses en Granada que Rajoy durante todos sus años de presidente.
Por su parte, Adelante Andalucía está buscando posicionarse en Granada como el partido en defensa de la Educación Pública y el I+D+i en Universidad, un voto complicado dada la cantidad de universitarios censados fuera de la provincia. Asimismo, sigue apelando a cuestiones sensibles como recuperar el histórico barrio del Albaicín y, por supuesto, a la lucha en temas sociales.
También Ciudadanos hace hincapié en cuestiones de índole social como la Dependencia a través de sus encuentros con colectivos. La formación naranja, sabedora de sus posibilidades y después de haber formado una estructura más sólida en toda la provincia con militantes en todas las comarcas, está pudiendo abarcar en la campaña propuestas dirigidas a los grandes proyectos de Granada.
Un cuarteto de mujeres candidatas en el que sólo hay una cara nueva
Los cuatro números uno de las listas de los principales partidos por Granada pertenecen a mujeres. Un dato, afortunadamente, cada vez menos anecdótico en el ámbito político.
Aunque quizás la principal lectura de las cuatro candidatas de las formaciones con opciones de representación es que tres de ellas ya están fogueadas en el Parlamento de Andalucía, especialmente la socialista Teresa Jiménez y la popular Marifrán Carazo que suman entre las dos varios legislaturas asistiendo a las sesiones plenarias en el antiguo hospital de las Cinco Llagas.
Un duelo el de Jiménez y Carazo que se ha convertido en prácticamente un clásico de las elecciones andaluzas en Granada. Además, por Adelante Andalucía también repite Carmen Lizárraga –que en los anteriores comicios fue la número dos–, pero que más tarde acabaría ejerciendo de número uno como sucesora del fallecido José Luis Serrano.
Así, la única cara nueva de las candidatas al Parlamento es la de Mar Sánchez, de Ciudadanos, que pasará del trabajo municipal en el Ayuntamiento de Granada al autónomico.
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