"Entiendo que la gente se cabree con la política. Yo también lo hago"

Lleva media hora delante de un micrófono en las antiguas dependencias de los juzgados de Arcos, hoy sede de la radio municipal, hasta donde ha acudido cada jueves de los últimos cuatro años para explicar a la ciudadanía la gestión municipal. Le gustan las distancias cortas y las ondas radiofónicas se lo permiten. Le viene en la sangre. Por encima de su responsabilidad política, le queda siempre el poso de su profesión de periodista. "Yo con un micrófono en la mano me desenvuelvo como pez en el agua. Soy feliz. Nunca lo consideré un trabajo sino mi hobby", dice el alcalde de Arcos, José Luis Núñez, que vuelve a repetir como candidato del Partido Popular a las municipales del próximo 24-M.

El paso por la política tiene más de un sinsabor, pero también, para él, trae compensaciones al ver materializar proyectos para el pueblo. Confiesa que no tiene, ahora mismo, deseos personales. "A mí lo que me importa es que se acabe la lacra del paro, que está siendo cruel con muchas familias", contesta. Por eso, entiende que "la gente esté cabreada con la política. Es normal. Yo también lo digo. Hay veces que me he cabreado con mi propio partido y con determinadas medidas que se han tomado. Pero entiendo que son decisiones necesarias para reconducir la situación dramática que vivía España hace pocos años. Hay que ponerse en la piel de nuestros gobernantes porque estábamos al borde del abismo".

Viste camisa azul claro y pantalón oscuro en una jornada donde ya aprieta el calor. Está a poca distancia del barrio de su niñez, el de San Pedro, donde cosechó una infancia alegre. "Mi padre era jornalero y mi madre portera en los juzgados. Provengo de una familia humilde, pero en aquel barrio disfruté de una niñez feliz, pese a las dificultades económicas". Lo evoca con nostalgia, pero aterriza en un segundo en la realidad. La apretada agenda manda. Tiene actos programados, donde estarán sus socios de gobierno, los del AIPro, con los que ha compartido la Alcaldía los cuatro años. Habla bien de este matrimonio. Como en todos, ha habido "alguna que otra dificultad y discusiones", pero la sangre no ha llegado al río.

Eso sí, Núñez termina el mandato con una imputación judicial para sí y para ocho miembros más de su gobierno a dos bandas por supuesto enchufismo. Algo que no le quita el sueño, apostilla. "Sólo puedo decir que en otros mandatos, algunos entraban y se quedaban en el Ayuntamiento sin méritos ni oposiciones. Incluso hubo familiares del concejal socialista que ha puesto la querella. Sin embargo, aquellos contratados que se atribuyen a mi persona han entrado, pero han salido del Ayuntamiento. No sé si enchufismo es ayudar a una persona que necesitaba 33 días de trabajo para percibir una prestación para poder salir adelante, como a otras más personas se les ha dado, y sigue estando parada", añade. Mientras habla de esta espinosa cuestión, bajo el brazo, lleva un álbum de fotos de su trayectoria como locutor. Este Diario le ha pedido una de aquellos años. Las hay de todo tipo. Está con líderes políticos de todos los colores, con artistas, con personalidades…¡Cómo han cambiado las tornas!

Si logra revalidar su cargo como alcalde, Núñez estará otros cuatro años de excedencia profesional. Aunque no se quiere fiar de las encuestas, que ven al PP como la fuerza más votada en esta localidad, anota que hay mucho que pelear todavía. En Arcos, el pastel electoral se lo quieren comer siete formaciones políticas.