Encuestas en la primera parte

Los sondeos forman parte de la ceremonia electoral, dicen en el PP. Su candidato a la Alcaldía de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, recuerda que, desde hace mucho tiempo, las encuestas no se suelen corresponder con el veredicto de los sevillanos a través de las urnas. "Siempre ganamos", apuntaron ayer para advertir que no hay sondeo que pueda desviar su camino marcado. Para el alcalde, que se presenta como el candidato más votado, su preocupación es la misma de estos años atrás: seguir escuchando a los sevillanos y mirándoles a los ojos.

A Zoido no parece inquietarle la campaña. Su estrategia pasa por hacer que pase inadvertida, en coherencia con su creencia de que ningún cambio es necesario en la ciudad, pues éste ya llegó hace cuatro años.

Una interpretación totalmente opuesta a la que hace del sondeo publicado el pasado domingo por este periódico el candidato del PSOE, Juan Espadas, para quien la consulta es la prueba de que el alcalde ha perdido gran parte del apoyo ciudadano que conquistó en 2011. "Es cierto que todo está abierto, pero también que hay partido y que la gente quiere un cambio", apuntó ayer el socialista, para quien un dato revelador es el 45% de ciudadanos consultados que creen, con independencia de su voto, que el vencedor será el PSOE. "Eso es un elemento de contrapeso que no se ha visto en otros sondeos, me quedo con esto más que con el reparto de concejales", añadió.

Los socialistas confían en acaparar, conforme se acerque la cita con las urnas, el voto de la izquierda, ahora más dividido que nunca, en referencia a Participa Sevilla, Ganemos o Equo. Una dispersión que, según Espadas, puede provocar que ninguna de estas fuerzas obtenga el 5% necesario para lograr representación en el Pleno municipal.

Esta sensación de victoria socialista que revela el sondeo es un elemento que genera confianza para Espadas, que espera que el deseo de cambio que él observa en el electorado se traduzca en votos en las urnas.

El PSOE defiende que el voto a Espadas es el útil. Para Izquierda Unida, su candidatura es la "única alternativa real, nítidamente de izquierdas y reconocible ante un panorama marcado por el más de lo mismo del PP y del PSOE y la ambigüedad calculada y el marketing vacío de los nuevos partidos franquicias que están aflorando", apuntaron ayer desde la federación. Para IU, lo único claro, después de los sondeos, es que "el mal llamado efecto Zoido es ya historia". Daniel González Rojas, el candidato de IU, saldrá a ganar, con un proyecto renovado y confían en que el resultado cambie en el último minuto: "Las urnas están vacías y no hay nada escrito hasta el 24 de mayo".

Lo que tienen muy claro también en Participa Sevilla tras conocer el sondeo es que "es el fin de las mayorías absolutas y el descalabro del bipartidismo, la gente no confía en la casta", apuntaron desde la candidatura de Susana Serrano. La lista verdemorada obtiene una considerable representación en el Ayuntamiento -entre 4 y 5 concejales- a pesar de tener un mes de vida y ser fusión de diferentes plataformar ciudadanas. Dicen que darán la sorpresa.

Prudentes se presentaron ayer los representantes de Ciudadanos, el partido que se consagra como bisagra en las encuestas. Su candidato, Javier Millán, insistió ayer en que no salen a pactar, sino a ganar. "Las dos opciones son el inmovilismo que representan el PP y el PSOE o el cambio, que sólo puede venir de Ciudadanos", apuntó, satisfecho y convencido de que el partido de Albert Rivera es una tendencia en alza y que estará presente en el Pleno municipal, "porque es el mejor proyecto, es el cambio sensato que necesitan los sevillanos".

El bipartidismo, para Millán, está decadente. Y éste es un camino que acaba de empezar y que irá creciendo conforme aumente el grado de conocimiento que la ciudadanía tiene del candidato y de su lista. "Si hay pluralismo, como pintan las encuestas, nos sentaremos a hablar con quien sea, pero siempre sobre la base de propuestas", insistió Millán.

El partido continúa.