Desempolvando Valcárcel

Comenzó a construirse en el año 1730, pero por falta de financiación no se erigió hasta 1763. Lo primero que albergó el edificio Valcárcel fue una escuela privada de dibujo, aunque con posterioridad cumplió su vocación primigenia y se convirtió en un hospicio, acogiendo a miles de niños huérfanos de la provincia. En el tercer tercio del XIX pasó a depender de la Diputación Provincial, conociéndose como Casa de la Misericordia y más tarde, como Hospicio Provincial y Hogar de la Milagrosa. Ya en 1961 se unificaron los hospicios de Cádiz, pasándose a llamar la Institución Carlos Valcárcel, en honor al gobernador Carlos María Rodríguez de Valcárcel y Nebrada, y la educación pasó a ser la ocupación principal del equipamiento durante años.

El mal estado de conservación de la instalación motivó su cierre, y fue en el año 2003 cuando la Diputación Provincial llegó a un acuerdo con la empresa Zaragoza Urbana, que adquirió los derechos de explotación del edificio con la idea de crear en él un hotel de 5 estrellas. Pero las pugnas políticas obstaculizaron y atascaron la materialización del proyecto hotelero, que sigue hoy acumulando polvo en algún cajón. El edificio, clausurado, también acumuló polvo y basura durante años, hasta que en junio de 2011 un grupo vinculado al 15-M ocupó la infraestructura y la dotó de contenido social. Sin embargo, siete meses después, agentes policiales hicieron efectiva la orden de desalojo del histórico inmueble. Desde entonces, este Bien de Interés Cultural está cerrado a cal y canto.

Eso sí, en los programas electorales de las diferentes agrupaciones que concurren a las elecciones municipales el edificio aparece abierto, aunque con diferentes usos. Así, son varias las formaciones que respaldan la propuesta lanzada por el rector de la Universidad de Cádiz, Eduardo González Mazo, de trasladar la Facultad de Ciencias de la Educación -asentada en el Campus de Puerto Real- a la finca diseñada por el arquitecto Torcuato Cayón de la Vega. Pero también hay quienes siguen apostando por la construcción del establecimiento hotelero, y quienes plantean otros opciones, como convertirlo en la sede del Museo del Carnaval o en la de la Ciudad de la Justicia.

Desde el Partido Popular aseguran tener muy claro el modelo de ciudad que quieren para Cádiz. Lo tienen tan asumido -afirman- que está reflejado en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad. "Confiamos plenamente en la recuperación económica del país, y por ende, de la ciudad de Cádiz", introducen desde la candidatura de Teófila Martínez antes de manifestar que mantienen su intención de dotar al edificio de uso hotelero, así como aprovechar los espacios libres y crear un aparcamiento. "Consideramos que la mejor opción para esta zona de la ciudad es propiciar equipamientos como es el Parador o como puede ser un hotel para atraer desarrollo económico, turismo y generar empleo en Cádiz, que es nuestro principal objetivo".

El PSOE, en cambio, lleva tiempo reclamando la vuelta de la Facultad a Cádiz, y para tal fin propone dos emplazamientos: el edificio Valcárcel o la creación del complejo Náutica-Olivillo. Argumentan que ambas posibilidades permitiría la recuperación de edificios emblemáticos para la ciudad y avanzar en la consolidación de la Universidad gaditana. "Ante la parálisis del proyecto hotelero, proponemos el traslado de la Facultad a Valcárcel, en cuya parcela se instalarían las pistas deportivas que precisa el centro y se construiría también un aparcamiento subterráneo. Planteamos -exponen desde la candidatura de Fran González- la integración del edificio en la ciudad y en el barrio en el que se asienta, revitalizándolo". Además, desde el partido recalcan que el regreso de Ciencias de la Educación a la capital supondría recuperar una comunidad universitaria de unas 3.000 personas, además de crear 400 puestos de empleo durante los trabajos de rehabilitación. El propio alcaldable está convencido de que este proyecto se hará realidad a través de un acuerdo entre las administraciones. "Ha llegado la hora de alcanzar amplios compromisos políticos-sociales para dar un futuro a Cádiz", defiende.

Ciudadanos Cádiz también aboga por darle uso universitario al histórico inmueble, e igualmente señala que en la parcela del Valcácel hay espacio suficiente para instalar pistas deportivas. "Este proyecto daría riqueza a la ciudad y al barrio, y la vuelta de Magisterio contribuiría a recuperar la juventud que se marchó de la zona tras el traslado de la Escuela Superior de Ingeniería al Campus de Puerto Real". La candidatura que lidera Juan Manuel Pérez Dorao no ve "suficientemente claro" la instalación de un hotel "tan grande" como el previsto por Zaragoza Urbana, y esgrime que actualmente se está apostando por "pequeños hoteles con encanto, fácilmente gestionables, con más futuro y que se defienden mejor en tiempos de crisis".

Ganar Cádiz en Común también rechaza la construcción de un complejo hotelero. La coalición de izquierdas se posiciona "absolutamente en contra de que se privatice el uso de este edificio, que es patrimonio de todo el pueblo de Cádiz". Es por ello que defienden que sea la sede de la Facultad de Ciencias de la Educación o bien, de la Ciudad de la Justicia. Subrayan que este equipamiento es "muy necesario para Cádiz" y lamentan que se encuentre cerrado. A pesar de esas dos propuestas, desde la agrupación aseguran que el mejor uso que ha tenido el edificio Valcárcel es "el que numerosas personas y colectivos le dieron durante más de seis meses en 2011, cuando volvieron a dotarlo de vida y actividades sociales".

Tanto esta agrupación como la de Por Cádiz sí se Puede consideran que la gestión de Valcárcel por parte de la Diputación provincial ha sido desastrosa. La candidatura que encabeza José María González Kichi plantea abrir un proceso participativo para que la ciudadanía decida sobre el uso que debe tener el recinto. No obstante, la formación considera que toda esa zona debe someterse a una reordenación urbanística que ayude a regenerar los barrios de La Viña y el Balón. "En dicha reordenación Valcárcel podría habilitarse -sugieren- para cumplir funciones socio-culturales y administrativas que fueran complementarias, permitiendo integrar el edificio en la vida del barrio y acoger servicios de la administración, como el de Justicia, que actualmente se encuentran dispersos y sin equipamientos apropiados".

Proponen, por tanto, no esperar el proyecto de Ciudad de la Justicia de nueva planta en el solar del antiguo pabellón Portillo, "para el que no hay fondos", y adaptar un edificio ya existente, como Valcárcel. Pero no sería ése su único uso. Por Cádiz sí se Puede ve también con buenos ojos dedicar algunos de los espacios del recinto a actividades socio-culturales. No obstante, recalcan que, en cualquier caso, su apuesta pasa por "generar unos mecanismos de participación que permitan a la ciudadanía escuchar a todas las partes interesadas y decidir por sí misma cómo van a integrarse estos espacios en desuso en un nuevo modelo de ciudad".

Por su parte, UPyD secunda la iniciativa de acomodar la Facultad de Ciencias de la Educación en el edificio, pero en el caso de que no prospere propone un "ambicioso proyecto": la construcción de un hotel de 3 o 4 estrellas y un centro polivalente del Carnaval que se llamaría La Ciudad del Carnaval y que contaría con diversos equipamientos. El alcaldable Felipe Marín detalla que Valcárcel albergaría un hotel, un museo y centro de investigación, digitalización y archivo del Carnaval de Cádiz, una veintena de locales de ensayo acondicionados, un estudio de grabación municipal, la sede de la escuelas municipales de pulso y púa, costura y artesanía de decorados, un auditorio para actuaciones y locales de hostelería. Ésta es su apuesta.

La agrupación local del Partido Andalucista también plantea en su programa un proyecto integral denominado La Viña y que propone ubicar el Parador en el Valcárcel, así como el museo del Carnaval en las naves traseras del antiguo hospicio, puesto que consideran que carecen de valor hotelero relevante. El candidato andalucista, José David Sánchez, también aboga por habilitar una zona de aparcamiento público de 510 plazas en el terreno anexo al Valcárcel, darle uso hotelero al Balneario de la Palma, trasladar el centro de Arqueología Subacuática al castillo de San Sebastián, y convertir la plaza de la Reina en una zona verde de esparcimiento y convivencia.

La última noticia que se ha conocido sobre el inmueble Valcárcel es que Zaragoza Urbana trasladó a mediados del pasado año a la Diputación Provincial su interés por reactivar el proyecto hotelero, aunque introduciendo una serie de cambios en el diseño inicialmente previsto, que en su momento suponía una inversión de unos 50 millones de euros. Y asimismo la cadena hotelera informó a la Diputación que estaba en conversaciones con una empresa del sector para unirse al proyecto, lo que facilitaría su financiación y, por tanto, su ejecución. Pero en los últimos meses no han trascendido novedades acerca del futuro de este monumento histórico-artístico que sigue acumulando polvo.