Un detenido en La Carlota propicia que se desmantele un arsenal de armas de guerra
Fusiles de asalto, subfusiles, ametralladoras, revólveres y rifles. Una investigación emprendida hace un año por el Grupo de Información de la Guardia Civil de Córdoba acaba de concluir con el hallazgo de "uno de los mayores arsenales de la historia reciente de España", según subrayó ayer el subdelegado del Gobierno en Córdoba, Juan José Primo Jurado, para explicar el resultado de la segunda fase de la operación Garand.
Todo arrancó hace en mayo de 2014 a raíz de la detención de un vecino de la localidad cordobesa de La Carlota por los delitos de tráfico y tenencia ilícita de armas. Tras analizar las pruebas obtenidas en aquel momento, los agentes comprobaron que el individuo estaba relacionado con el ahora detenido, un vecino de la localidad de La Coruña que se dedicaba a la adquisición de piezas y de armas de fuego inutilizadas, muchas de ellas de guerra (fusiles de asalto y subfusiles), que posteriormente manipulaba para ponerlas de nuevo en condiciones de disparar y efectuar fuego real.
El hombre detenido en Galicia es subteniente del Ejército de Tierra y se le imputan los delitos de tenencia y tráfico de armas, depósito de armas de guerra, depósito de municiones y falsedad documental.
En los registros los agentes intervinieron 110 armas de fuego, entre ellas 30 fusiles de asalto, 18 subfusiles, 47 pistolas, 12 rifles y carabinas y tres revólveres. También encontraron diez silenciadores, cinco kilos de pólvora, más de 130.000 cartuchos metálicos de diferentes calibres y piezas para rehabilitar armas.
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