La asociación de farmacéuticos andaluces expresa su "hartazgo" con el sindicato de enfermería
Satse ha tachado de "intrusismo" que los boticarios puedan hacer cribados o administren vacunas
Los enfermeros denuncian la privatización encubierta de la sanidad andaluza
Las profesiones enfermera y farmacéutica llevan un tiempo enzarzadas. Los boticarios quieren aumentar los servicios que prestan en las oficinas de farmacia y los enfermeros, sus representantes sindicales, creen que tales servicios son propios de su gremio. La crítica se produce también en el sentido contrario: los enfermeros van a poder recetar ciertos medicamentos y a los farmacéuticos no les convence la idea. El último episodio de la batalla dialéctica ha llegado como consecuencia de la que difundida por el sindicato de Enfermería Satse en Andalucía, que califica de "intrusismo" a los boticarios y que avisan de una "privatización encubierta" del sistema público de sanidad por el reciente acuerdo firmado entre la Junta de Andalucía y el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Farmacéuticos. El pacto posibilitará a las boticas a efectuar cribados de cáncer de colon o vacunas, por ejemplo, y Satse cree que esos servicios corresponden en exclusiva a la enfermería.
Los boticarios están hartos. No es la primera vez que Satse critica a la administración pública por impulsar nuevos servicios en las farmacias y la Asociación Sindical de Farmacéuticos Adjuntos de Andalucía (Asfas) han respondido a sus homólogos enfermeros en una nota pública, expresando su "descontento y hartazgo" por los "ataques sistemáticos contra el sector farmacéutico y las oficinas de farmacia". El gremio de los boticarios defiende su compromiso con el "bienestar de la población" y considera que las nuevas funciones asistenciales que les permite el acuerdo con la Junta de Andalucía están dirigidas a "beneficiar a la ciudadanía". Las declaraciones de Satse, sin embargo, pueden dificultar los cambios en las boticas. Asfas cree que ésas pueden ser las consecuencias de "la constante descalificación por parte de Satse", que "crea un ambiente de discordia en lugar de colaboración".
El portavoz de Asfas, Julián Laínez, quiere subrayar un mensaje de paz y concordia y afea los mensajes del sindicato Satse, unas críticas que no amplía de ningún modo a la profesión enfermera en su conjunto. "Queremos trabajar con los enfermeros y con los médicos, pues creemos firmemente en un modelo de trabajo con los otros trabajadores de la salud, una tarea que redunde en el bienestar y en la salud de los pacientes", ha explicado Laínez a este periódico. El portavoz de Asfas, que recuerda las tareas que ya comparten en diversos foros con médicos y enfermeros, con los profesionales y con sus representantes colegiales, cree fundamental la labor que pueden llevar a cabo los boticarios desde las oficinas de farmacia para disminuir el "colapso" en la Atención Primaria.
Más competencias en la prescripción farmacéutica y críticas a la de los enfermeros
La nota de Asfas, insistente en el rechazo a que "los intereses particulares generen ruido innecesario y división", reitera en un llamamiento por la "unidad y el diálogo" que debe reinar en las relaciones entre los "diferentes sindicatos y profesionales de la salud" y reivindica su papel en el sistema de salud. "Es por ello por lo que pedimos más herramientas que faciliten la dispensación de medicamentos a los pacientes, como es la posibilidad de cambiar formas farmacéuticas de un mismo principio activo", menciona como ejemplo la asociación sindical de farmacéuticos.
Como conclusión, los boticarios se oponen a la "inclusión de la enfermería en el proceso de la prescripción de los medicamentos y renovaciones de tratamientos crónicos", refiriéndose a una norma aprobada recientemente por el Ministerio de Sanidad, y lo hace con el argumento de que, esas prestaciones por parte de los profesionales de la enfermería "podría generar confusión en los pacientes y en el sistema de salud" por "diluir las responsabilidades y las competencias de cada profesional". Los médicos también aludieron al intrusismo de los enfermeros.
También te puede interesar