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Andalucía encabeza el porcentaje de gasto social aunque está a la cola por habitante

La inversión en sanidad, educación y servicios como dependencia crece desde 2010 pero reduce el peso en el presupuesto

Un informe destaca el esfuerzo andaluz aunque el dinero per cápita sólo sea más alto que en Madrid, Cataluña y Murcia 

El retraso en la prestación para la dependencia sube al año y ocho meses  

Un grupo de ciudadanos merodean la puerta de un centro de salud en Málaga. / Javier Albiñana

Andalucía está entre las comunidades autónomas que destina más porcentaje del presupuesto a las políticas sociales, un 63,4% frente al 58% de la media nacional, aunque el reparto de dinero por habitante se sitúa en Andalucía entre las cuatro últimas, con un gasto medio de 3.035 euros frente a los 3.124 euros de la media del país, estando sólo por encima de Madrid, Cataluña y Murcia. 

Según un informe publicado este jueves por la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales y recogido por Efe, en la comunidad andaluza ha crecido un 34% el gasto destinado a políticas sociales entre 2010 y 2023 frente a un aumento medio en España del 28%, entendiendo el gasto en políticas sociales al asignado a las políticas de sanidad, educación y servicios sociales. En el análisis de este capítulo de gasto en relación con el presupuesto total, la comunidad andaluza ha reducido el peso del gasto social en el presupuesto en casi tres puntos: del 66,1% que se invertía en 2009 al 63,4 de 2023.

Educación, la mejor parada

En el capítulo de sanidad, Andalucía, según el informe, ha destinado un 33,8% de su presupuesto a este capítulo en 2023, por encima de la media de España (30,6%), si bien el gasto medio por habitante, de 1.594 euros, es inferior al nacional, fijado en 1.635 euros.

En cuanto al gasto en educación, Andalucía sale mejor parada en la comparativa nacional al destinar un 30,5% del presupuesto a este capítulo social frente al 27% de la media de las comunidades autónomas. El gasto por habitante es de 221 euros, ligeramente superior a los 197 euros de promedio de España.

El informe asegura que en 2023 las autonomías dedicaron casi 149.363 millones de euros a sanidad, educación y servicios sociales, incluida la dependencia, lo que supuso 3.124 euros por habitante. Al mismo tiempo, el porcentaje que las comunidades autónomas en conjunto destinan a las políticas sociales ha pasado del 67,4% del presupuesto total en 2010 al 58,4% en 2023.

Pese a que esa cifra absoluta fue la más alta de la historia, el informe señala que sólo uno de cada diez euros de aumento de los presupuestos autonómicos en 2023 se destinó a políticas sociales. En concreto, en 2023 los presupuestos de las comunidades aumentaron en 15.469,3 millones de euros, mientras que la inversión en políticas sociales sólo aumentó en 1.946,6 millones, lo que representó únicamente 12,6 de cada 100 euros más de gasto.

Paulatina reducción del porcentaje de gasto social en los presupuestos

Año tras año, subraya, las comunidades autónomas destinan menos porcentaje de sus presupuestos a políticas sociales. En la comparativa histórica la asociación apunta que los recortes realizados en materia de políticas sociales a partir del año 2010, que califica como "especialmente drásticos" en 2013, condujeron a que en ese último año se registrase el nivel más bajo en gasto autonómico en sanidad, educación y servicios sociales, con menos de 100.000 millones de euros (99.977,9).

Desde 2014 hasta 2020 se fueron registrando aumentos en los presupuestos liquidados del conjunto de las comunidades autónomas y en los años siguientes, fruto de la gestión de la pandemia, el gasto social fue aumentando en gran medida.

El informe llama la atención sobre el hecho de que, aunque la crisis sanitaria y social provocada por la pandemia demostró la importancia del gasto en los servicios públicos esenciales de sanidad, educación y servicios sociales, el incremento del gasto en estas políticas gestionadas por las comunidades sólo ha sido el 9,1% entre 2020 y 2023. Con más detalle indica que el aumento ha sido del 0,2 % en sanidad, del 16,8 % en educación y del 33,5 % en servicios sociales.

El peso de la deuda pública

En cambio, el estudio refleja que el crecimiento del gasto en el resto de políticas fue el 55,7% en ese mismo periodo, lo que significa seis veces más, y "evidencia la pérdida de peso específico del gasto social en las comunidades autónomas". El mayor incremento del gasto autonómico en los últimos años se registra en el coste la deuda pública, con más de 16 puntos entre 2019 y 2020.

Desde 2009, todas las comunidades han incrementado el gasto en el conjunto de áreas analizadas, en mayor medida Baleares, con un incremento por habitante del 47%, seguida de la Comunidad Valenciana (41%), Asturias (40%) y Extremadura (casi un 40%). Estas cuatro comunidades autónomas han incrementado en más de 1.000 euros por habitante su inversión en políticas sociales.

Revela también el informe que la desigualdad en los servicios que las comunidades ofrecen a su ciudadanía queda patente al analizar su inversión en políticas sociales.

Las comunidades que menos invierten en esta área son Madrid (2.464 euros por habitante), Cataluña (2.942), Murcia (3.008) y Andalucía (3.035 euros), mientras que las que más destinan a las políticas sociales son Navarra (4.161), País Vasco (4.079) y Extremadura (3.960).

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