Valderas cree que Andalucía sufre una "intervención indirecta"
El vicepresidente de la Junta de Andalucía, Diego Valderas, aseguró ayer tras una reunión mantenida con el presidente de la Audiencia de Sevilla, Manuel Durán Marín, y la fiscal jefe de esa provincia, María José Segarra, que la comunidad "está sufriendo una intervención totalmente indirecta por parte del Gobierno" con la que se condicionan continuamente "sus presupuestos y su Estatuto de Autonomía".
Así lo consideró el número dos del Gobierno andaluz, quien afirmó que "hay una realidad encima de la mesa" y que si no hay una "intervención directa", sí la está habiendo de forma indirecta". Igualmente, señaló que esta situación permanente impide "la posibilidad de solventar los problemas de los servicios de la comunidad".
Valderas quiso expresar el rechazo de la Junta y el de otras comunidades autónomas ante los recortes que ha llevado a cabo el Gobierno central y confirmó además la intención del ejecutivo de Griñán de presentar un recurso de inconstitucionalidad contra el Decreto Ley 20/2012 de medidas para garantizar la estabilidad presupuestaria y de fomento de la competitividad, aprobado la semana pasada por Rajoy. "Que nadie dude de que la Junta recurrirá cualquier elemento que lógicamente incumpla la Constitución", insistió Valderas.
Por otro lado, adelantó que el Gobierno andaluz pretende restituir la paga de julio a los funcionarios tras revisar su plan de ajuste, y también que se "están revisando otras cuestiones para no duplicar el sacrificio exigido a los empleados públicos".
El también consejero de Administración Local y Relaciones Institucionales aprovechó la oportunidad para valorar como "positiva" la decisión del Tribunal Constitucional de levantar la suspensión cautelar de cinco meses que pesaba desde el pasado mes de abril sobre la resolución del SAS que validaba en la práctica la subasta pública de medicamentos en Andalucía.
A su salida de la Audiencia sevillana, Valderas, fue objeto de pitidos y abucheos al grito de "Valderas dimisión". El líder andaluz de IU aseguró que la protesta no iba contra él sino contra los recortes del Gobierno de Rajoy.
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