Susana Díaz convoca elecciones en Andalucía el 2-D para que haya un Parlamento antes de fin de año

La presidenta de la Junta, Susana Díaz, ha convocado las elecciones andaluzas para el 2 de diciembre. Esta misma tarde del lunes se ha reunido el Consejo de Gobierno para disolver el Parlamento y posteriormente ha intervenido la presidenta para explicar la decisión, que ha justificado en la falta de estabilidad y en que Andalucía "no se merece" una campaña electoral "de entre cinco y seis meses". "Es un acto de responsabilidad para que haya un Parlamento andaluz antes de final de año", ha asegurado.

"Mi tierra no merece la inestabilidad que hay en el resto de España", ha señalado Díaz, que ha subrayado que ha tomado esta decisión "pensando en Andalucía", en que esta comunidad tenga "estabilidad, seguridad y certidumbre". Según la presidenta de la Junta, se trata de un "acto de responsabilidad", para que, cuando empiece el nuevo año, Andalucía cuente con un nuevo Parlamento".

El decreto, que entrará en vigor este martes, una vez sea publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, recoge que la sesión constitutiva del Parlamento andaluz de la XI legislatura será el 27 de diciembre. En el momento que la presidenta ha firmado este decreto, el Parlamento ha quedado disuelto, así como la comisión de investigación de las tarjetas de la Faffe, la extinta fundación de la Consejería de Empleo.

Díaz ha asegurado que el primero en conocer su intención ha sido el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. Ha confirmado que al "primero que llamé" para comunicar la decisión de adelantar las elecciones y de disolver el Parlamento de Andalucía ha sido al presidente, con el que "tengo una comunicación y relación muy fluida, al igual que ambos equipos", ha precisado.

Tal como este periódico había informado este fin de semana, la presidenta sólo tenía dos opciones: o ir al 2 de diciembre o esperar al mes de marzo, pero nadie en su Gobierno ni en el PSOE respaldaban esta última opción. Los socialistas confían en revalidar la victoria que le otorgan las encuestas, aunque necesitarían a Ciudadanos.

La ruptura de la alianza parlamentaria con Ciudadanos ha llevado a la presidenta a adoptar esta decisión, que supone un recorte de tres meses de la décima legislatura. El PSOE, con 47 escaños sobre 109, ha gobernado gracias a un pacto con los de Albert Rivera. Los naranjas cuentan con ocho. El PP es el segundo grupo con 31, y Podemos e IU suman 20.