La aldaba
Carlos Navarro Antolín
El pase robado con la 'mafia' del taxi de Sevilla
Sevilla/Pasadas las diez y media de la noche los negociadores de PSOE y Podemos concluyeron una reunión de casi tres horas en la nueva ronda de negociación que han abierto los socialistas para buscar un acuerdo de investidura. Como en las tres ocasiones anteriores, la reunión terminó en fiasco. Podemos consideró que los socialistas dieron "carpetazo" al aplazar nuevos contactos a la finalización de las elecciones autonómicas y locales del 24 de mayo. Los socialistas insistieron en el diálogo, ya que hoy retoman la negociación con PP, Ciudadanos e IU para desbloquear la investidura de Susana Díaz, aunque sin la opción de Podemos la solución se limita a los populares de cara a la nueva votación que se producirá mañana en el Parlamento, la tercera.
Las condiciones que Podemos ha puesto sobre la mesa han vuelto a ser el asunto de negociación. Los socialistas, según anunció su portavoz parlamentario, Mario Jiménez, ofrecieron dos acuerdos. El primero, una comisión específica a petición del Consejo de Gobierno que revise los contratos que la Junta de Andalucía tiene con los bancos, como paso previo para tomar iniciativas sobre los desahucios. La segunda, que en cuanto se forme Gobierno y se celebre la primera comisión parlamentaria de Administración Pública, la Junta ofrecerá la información reclamada sobre la estructura de la Administración de la Junta de Andalucía y sus entes instrumentales.
Estos ofrecimientos no sedujeron a los representantes de Podemos. En palabras de Manuel Garí, hombre de confianza de Teresa Rodríguez en la negociación, los que los socialistas ofrecen es un "acto de fe". "Dicen que lo van a hacer público más adelante, pero queremos conocerlo antes para orientar el voto", dijo. Podemos anunció que mantendrá el no a la investidura pese al llamamiento de los socialistas, que reivindicaron una "abstención responsable" de Podemos, en palabras de Jiménez.
Una de las diferencias se encuentra en la reforma de la Administración Pública. Para sentarse a hablar, Podemos quiere conocer su dimensión, tanto en número de altos cargos en empresas públicas como en el personal de confianza o asesores. Nada ha contribuido el PSOE-A a ese conocimiento, uno de los grandes agujeros negros de la Administración andaluza.
Lo máximo de lo que ha informado el PSOE es que desde 2008 se han reducido 42 puestos de personal eventual y desde 2011 un total de 263 puestos de directivos en empresas públicas, sin ofrecer los totales. Sí aporta, ante la reclamación de Podemos de que los altos cargos en las consejerías sean sólo los consejeros y viceconsejeros, que en la Administración General, de 197 altos cargos, 111 son funcionarios (56,3%). El secretario de Organización de Podemos, Sergio Pascual, dijo ayer que los socialistas apuntan a una próxima publicación de estos datos en el portal de transparencia, cuando a finales de junio entre en vigor la ley autonómica.
"Nos parece razonable que se adelante para conocer cuán amplio es el gesto de recorte de altos cargos", completó Pascual. El ofrecimiento del PSOE para conseguir la abstención de Podemos se elevó de un 5% a un 10% en el número de empresas públicas y sus directivos, además de altos cargos y asesores.
En materia de lucha contra los desahucios, Podemos reivindica que la Junta no convenie con los bancos que aplican desahucios a personas sin recursos y sin alternativa habitacional derivadas de las deudas hipotecarias. El PSOE asegura que se buscará una "solución legal" y ofrece incorporar cláusulas sociales en los convenios y un sistema de arbitraje. Podemos asegura que es posible dejar de conveniar y se remite a la propuesta que hace en su programa electoral Emiliano García Page (candidato del PSOE en Castilla-La Mancha) y a la experiencia de otras administraciones que lo han hecho.
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