El 'efecto Illa' en Andalucía le marca la salida a Susana Díaz

El Gobierno puede relevar a la delegada en Andalucía, Sandra García, de marcado perfil susanista

Con el precedente catalán, Juanma Moreno no adelantará las elecciones, Ciudadanos se le hunde y Vox vuela

Montero, en medio, e Illa, a la derecha, durante la rueda de prensa.
Salvador Illa, junto a los ministros andaluces, María Jesús Montero y Juan Carlos Campos. / EFE

Cataluña impulsa los vientos de cambio en el PSOE andaluz y provoca un terremoto en los partidos del Gobierno de la Junta. La supervivencia de Ciudadanos está amenazada a medio plazo y Vox, que está fuera del Ejecutivo, sigue subiendo. En este contexto, hay que descartar, de modo definitivo, que Juanma Moreno vaya adelantar las elecciones andaluzas a este año; ahora más que nunca, el PP andaluz necesita ser fuerte por sí mismo.

En términos internos, a Pedro Sánchez le ha salido bastante bien la operación de recambio de Miquel Iceta por Salvador Illa al frente de la candidatura socialista en las elecciones catalanas de este domingo. Prueba de esto, de la autoría de Sánchez, es que ningún candidato del PSC se había referido en días de victoria a su partido hermano, el PSOE, e Illa lo hizo en varias ocasiones, además de agradecer la ayuda que le han prestado en la campaña el asesor aúlico de Moncloa, Iván Redondo, y su segundo, Francisco Salazar, sevillano y hombre de Quico Toscano, alcalde de Dos Hermanas.

Las lecturas que se han hecho esta semana en el PSOE andaluz es que Ferraz estará más decidido ahora para forzar la sustitución de Susana Díaz al frente del partido. Es una decisión de que tanto Ferraz como el Gobierno han madurado y está muy clara. Para después de las elecciones catalanas, y en función de cómo saliese la operación de Illa, se estaban estudiando diversas actuaciones en Andalucía. Ahora se adoptarán.

En estos momentos se está barajando la opción de relevar a la delegada del Gobierno en Andalucía, la susanista Sandra García. El movimiento es complejo porque supondría la apertura de hostilidades entre la dirección andaluza y la federal, por cuanto García ha sido el objeto del pacto que alcanzaron Pedro Sánchez y Susana Díaz.

En los últimos días, ha molestado el fichaje como asesora de una ex dirigente socialista de Algeciras, que se ha visto como un movimiento puramente interno para consolidar a los susanistas en esta ciudad. Otros asesores de la Delegación del Gobierno desarrollan una activa campaña en redes en contra de quienes se oponen, de un modo un otro, a Susana Díaz.

Otra acción puede ser el relevo en la diputación de Sevilla, donde su presidente, Fernando Rodríguez Villalobos, se comprometió a estar sólo una parte del mandato. Fue un acuerdo, verbal, que Susana Díaz alcanzó con Sánchez para salvar tanto a Villalobos como a la presidente de la Diputación de Cádiz, Irene García. El relevo de Rodríguez Villalobos, sin embargo, necesita de la participación de los alcaldes y concejales sevillanos que forman parte del pleno de la Diputación. Son ellos quienes tendrían que ejecutar la operación, y de momento el PSOE de Sevilla es leal a Susana Díaz.

En la derecha, el clima es más complicado. Ciudadanos se ha quedado detrás de Vox en las elecciones catalanas en un desastre que concierne, de modo personal, a Inés Arrimadas. Ella obtuvo 36 parlamentarios en 2017, y Carlos Carrizosa, que fue su apuesta, se ha quedado en seis. La evolución de Ciudadanos en los sondeos andaluces es mala también, y hay varios parlamentarios autonómicos que han exigido dimisiones en su partido por lo sucedido en Cataluña; entre éstos, Fran Carrillo.

Al PP le han ido las cosas igual de mal que en 2017, pero este nuevo fracaso afecta a Pablo Casado. Con estos precedentes, Juanma Moreno no se atreverá a modificar el escenarios electoral. Andalucía será la primera comunidad que celebre elecciones después de Cataluña, antes de las municipales y generales. Lo mejor será esperar y consolidar los avances que le están dando las encuestas, pero es muy posible que el PP tenga que contar más con Vox como aliado aritmético ante la caída de Ciudadanos.

El secretario de Organización del PSOE andaluz, Juan Cornejo, ha puesto el dedo en la herida de la alianza de Gobierno andaluz. "Ciudadanos ha dilapidado por completo la confianza mayoritaria de los catalanes en sólo cuatro años, como consecuencia de la foto de Colón y del blanqueamiento que Albert Rivera hizo a la extrema derecha. En Andalucía, que toma note Juan Marín de lo que le viene", ha indicado Cornejo. Ha concluido así su mensaje: "Cuando las barbas de tu vecino veas acortar, como ha pasado en Cataluña, Moreno Bonilla y Marín ponen ya las suyas a remojar".

stats