IU reprende a Montero por cerrar medidas de un Presupuesto "de dos"

"Ya está bien". Izquierda Unida mostró ayer su despecho ante el comportamiento de su pareja de Gobierno, el PSOE, y en concreto, de la nueva consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, al dar por cerrados elementos de los próximos Presupuestos de 2014 que, a juicio de la coalición, aún están abiertos. "Nos ha molestado porque parece que hay gente que no se ha dado cuenta de que está donde está porque IU lo quiere; en Andalucía hay un Gobierno de coalición y esa coalición es la que deberá determinar políticamente todos los aspectos del Presupuesto", recriminó en rueda de prensa el portavoz parlamentario de IU, José Antonio Castro.

IU tensa la relación semanas antes de la presentación de las cuentas más difíciles de la Junta, con recortes adicionales que Montero ha cifrado en 1.200 millones por las menores transferencias del Gobierno y el objetivo de déficit.

Pero el llamamiento de IU es sólo un toque de atención; la ruptura está descartada. "No contemplamos que no haya acuerdo para elaborar el Presupuesto", dijo Castro para enterrar la posibilidad de elecciones anticipadas. IU lleva semanas aceptando los desaires de su socio (banco de tierras, impuestos a superficies comerciales...) y, consciente de la sensibilidad de su electorado, pide al PSOE que mejore la comunicación. Ya el año pasado padeció los sinsabores de sus primeras cuentas, con recortes a empleados públicos y despidos de interinos. Este año el ambiente previo es aún peor, y por eso reclama sincronización. Castro desveló que el grupo de trabajo entre ambas formaciones - con dos componentes cada uno y cinco reuniones celebradas- acordó un pacto de silencio sobre las medidas a tomar hasta las puertas del 25 de octubre, fecha en la que se ven obligados a presentar el proyecto para llegar a tiempo este año. Pero Montero "rompió" el acuerdo con su "incontinencia verbal" y el martes tras el Consejo de Gobierno puso el foco en el empleo público y la inversión.

Rota la baraja, IU se puso a salvo y presentó alternativas, pero no dijo nada de qué pasará si el PSOE no las acepta. La coalición entiende, según dijo el diputado de IU Ignacio García, que se pueden conseguir entre 800 y 1.000 millones con sus propuestas.

En el capítulo de ingresos, IU insiste en nuevos impuestos (inspiradas en ERC, como las bebidas azucaradas o el tráfico aeroportuario). También la venta de patrimonio inmobiliario. A García le consta por la Agencia de Obra Pública que hay buenas ofertas "sin malvender como gangas", y afirmó que la Junta ha sido "conservadora" y ha querido vender al precio de hace cinco años terrenos y solares que llevan dibujados años en las cuentas autonómicas .

"Si una persona tiene un piso y se está muriendo de hambre, pues tendrá que vender", ejemplificó García. Sumó medidas de persecución contra el fraude fiscal, "pero no a quien pide una beca o ayuda al comedor, ésos no son los grandes defraudadores; hay que perseguir el patrimonio", dijo.

Castro mostró su "desacuerdo" con Montero de que no hay "más grasa" donde recortar y apuntó a las empresas públicas. "Habrá que revisar uno a uno los consorcios, o las fundaciones, porque nos podemos encontrar la sorpresa de que alguna no sirva para nada, que esté duplicada o que haya un número de trabajadores que nadie sepa por qué está ahí, sin concurso o publicidad. Ahí quedan elementos por exprimir", dijo. IU se ha mostrado reticente hasta ahora a despidos de personal entre estos 27.000 empleados. Pero ahora el escenario se complica e IU reclama medidas al PSOE, porque la única responsabilidad planteada (de un tercero, Rajoy), puede que no siempre sirva de excusa.