Guerrero sitúa a Viera como el responsable de que las ayudas fuesen discrecionales

El ex director general de Trabajo y Seguridad Social de la Junta, Francisco Javier Guerrero, ha situado al ex consejero de Empleo, José Antonio Viera, como el responsable de que las ayudas sociolaborales fuesen discrecionales, sin orden reguladora ni publicidad y que contaran con unos criterios muy generales.

Al inicio de la segunda jornada de su declaración ante la juez Mercedes Alaya, Guerrero ha afirmado que las ayudas sociolaborales tenían unos criterios muy generales y que los mismos partieron del consejero y el viceconsejero. El ex director de Trabajo ha reiterado que las ayudas eran discrecionales y sin orden reguladora porque el convenio no se publicó, y sostuvo que este criterio partió de José Antonio Viera, aunque supone que el Gobierno andaluz "le daría el respaldo".

Guerrero reconoció que como las ayudas no se publicaban no las podía conocer todo el mundo, sino los más próximos a la Administración, del entorno de la Consejería, la Junta y las organizaciones sindicales. El ex alto cargo ha admitido que este sistema se implantó por un "criterio político" y reiteró que el IFA y en toda la Consejería se conocían estas ayudas y nadie puso ningún reparo, puesto que aparecían en los expedientes y la contabilidad.

Guerrero señaló que el sistema lo puso en práctica él, pero que la idea no era suya, sino que eran "directrices" el consejero y el viceconsejero.

El ex director general de Trabajo y Seguridad Social ha asegurado ante la juez Alaya, que investiga las irregularidades en la ayudas públicas, que la concesión de subvenciones a determinadas empresas de la Sierra Norte de Sevilla, vinculadas al empresario José Enrique Rosendo, fue una "imposición" de Viera.

Guerrero ha ratificado el papel esencial que Viera desempeñó en la concesión de estas ayudas a las empresas de José Enrique Rosendo y su socio José María Sayago, y ha explicado que Viera continuó teniendo esa "influencia" para destinar las subvenciones una vez que abandonó el cargo de consejero de Empleo y ha revelado que incluso ya fuera de la consejería llegó a pedir que se "aumentara" la cuantía de las ayudas a estas empresas.

Según Guerrero, Viera y José Enrique Rosendo eran "amigos", y además este último era hijo del ex alcalde socialista de El Pedroso Rafael Rosendo, que también está imputado en la causa por recibir ayudas públicas.

El ex director general de Trabajo ha indicado que las empresas de Rosendo se "financiaron" con dinero procedentes de las ayudas públicas y dijo que José Enrique Rosendo era el director del grupo empresarial mientras que José María Sayago estaba a sus órdenes.

El ex alto cargo relató que la dirección general de Trabajo también tuvo que asumir otras ayudas promovidas por Viera, como la feria gastronómica de la Sierra Norte que se celebraba cada año en El Pedroso y en torno a la que había un "compromiso" de Viera anterior al año 2001 para que se sufragaran con fondos públicos de la dirección.

La influencia de Viera llevó igualmente a que se concediera una subvención de 30.000 euros al Ayuntamiento de El Pedroso para un plan de prevención de riesgos laborales, a pesar de que había un "informe desfavorable" de la Junta.

Guerrero también contó que en alguna ocasión hubo ayudas a las prejubilaciones de trabajadores que se quedaron sin cobertura presupuestaria, como ocurrió por ejemplo con la empresa Santana Motor, a la que se destinaron 98 millones pero el IFA destinó 68 millones a la misma empresa pero a otros conceptos.

El ex director de Trabajo también ha comentado a la juez que una subvención de 240.000 a la Sociedad de Desarrollo Local de El Pedroso (Sodelp), adscrita al Ayuntamiento, fue adelantada por el despacho de abogados Estudios Jurídicos Villasís porque uno de los socios del bufete, Carlos Leal, iba a representar a grupos de inversores que tenían interés en la realización de una serie de estudios de determinados sectores productivos con los que se pretendía captar precisamente a inversores.

Esta sociedad municipal se había creado además con parte de los 600.000 euros que había donado el editor José Manuel Lara tras ser nombrado hijo predilecto de El Pedroso, según ha contado Francisco Javier Guerrero.

Tras un receso para almorzar, la juez ha citado a los abogados para continuar la declaración a partir de las cuatro de la tarde.