La aldaba
Carlos Navarro Antolín
El alcalde de Sevilla no tiene una varita mágica
No hay descanso en el cruce de acusaciones y descalificaciones entre los dirigentes de los tres partidos mayoritarios en el Gobierno de Andalucía. Así, el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, aseguró ayer durante una visita a Chucena que "le repugna" la forma de hacer política del presidente del PP-A, Javier Arenas, tras apuntar a una posible financiación ilegal del PSOE a través de las irregularidades detectadas en los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE).
También el vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, calificó a Arenas de ser "profesional de la mentira y de la difamación" y que es "de los políticos que suelen tirar la piedra y esconder la mano".
A estas acusaciones por parte de los socialistas respondió la portavoz regional del PP, Rosario Soto, quien aseguró que lo que a su partido le "repugna es el oscurantismo, la soberbia y la forma de gestionar las políticas de empleo de Griñán". La dirigente popular indicó que el presidente andaluz ha sido "un fugitivo de los medios de comunicación durante 20 días, y en lugar de dar explicaciones, se dedica a insultar al PP-A y a su presidente, quien está trabajando para que todas las irregularidades se esclarezcan".
También aludió ayer al tema el coordinador andaluz de IU, Diego Valderas, quien volvió a plantear que el Parlamento andaluz investigue las irregularidades en los ERE financiados por la Junta, ya que existe la "necesidad de controlar a un Gobierno descontrolado". Valderas insinuó que el presidente andaluz conoce más de lo que dice respecto al tema de los ERE: "Creo que cuando Griñán cambió la Consejería de Empleo percibía lo que había, pero en lugar de limpiar la era se ha quedado cortito y se esconde detrás de la justicia".
El número de expedientes de regulación de empleo autorizados en Andalucía asciende en todo el año 2010 a 1.383, lo que supone un aumento del 9,6%, en relación con los 1.261 registrados en 2009. Sin embargo, los trabajadores afectados por ERE descendieron un 23,9%, hasta alcanzar los 19.492 trabajadores en 2010, frente a los 25.616 empleados afectados en 2009. De esta forma, Andalucía es la cuarta comunidad española por número de expedientes, siendo superada por Cataluña (3.279), Comunidad Valenciana (2.810) y País Vasco (2.171). Sevilla con 6.230 trabajadores afectados fue la provincia andaluza con más ERE tramitados y Huelva, con 686, la que menos.
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