Editorial: Presupuestos como los de 2007

LA consejera de Hacienda presentó ayer el proyecto de Ley de Presupuestos de la Comunidad Autónoma para 2013 como unos "presupuestos de resistencia". Se entiende que se refería a la resistencia desde la Junta a la recesión económica y a los recortes del Gobierno de la nación. También podían entenderse como de resistencia a cambiar algunas políticas que se han demostrado ineficaces, como las de empleo. Los primeros presupuestos pactados por la coalición PSOE-IU que gobierna Andalucía hacen retroceder las cuentas públicas de la región a un nivel aproximado al de 2007, antes de iniciarse la crisis. Con respecto al ejercicio actual, la reducción que significan estos 30.707 millones de euros supone un 4,1% menos, aunque con el ajuste efectuado en 2012 para cumplir el objetivo del déficit público la disminución real resulta inferior. Más importante es que la caída de la inversión alcance el 20%, lo que se hace en favor del mantenimiento del gasto social y las políticas de empleo, consideradas las dos grandes prioridades del Gobierno autonómico, a las que se deben sumar los gastos financieros derivados del endeudamiento, que crecen un 30%. Hay que decir, en todo caso, que en una situación de recesión, escasa capacidad de endeudarse y sujeción a los límites impuestos al déficit, la capacidad de maniobra de los gobernantes de la izquierda andaluza resulta considerablemente mermada. Llama la atención que las previsiones que se hacen sobre el escenario macroeconómico y que justifican estos presupuestos (caída de la economía andaluza en un 1,2%) son bastante más optimistas que la gran mayoría de las dibujadas por los analistas y expertos, y algo parecido se puede decir de los ingresos, cuyos datos no se concretan. Estamos ante unos presupuestos marcados por lo que podríamos llamar el continuismo en la estrechez. En su explicación pública se han detallado más las partidas que significan mantenimientos o mejoras que las que traen recortes y restricciones.