Cantos secundó y defendió la gestión de Gómiz en Invercaria

El ex director de Promoción de Invercaria, Cristóbal Cantos, que denunció su despido en "represalia" por su negativa a elaborar "informes falsos" ordenados por su superior inmediata, la ex presidenta de la sociedad, Laura Gómiz, sintonizó con ésta y con su forma de gestionar la sociedad. Cantos secundó y respaldó en numerosas ocasiones a lo largo del primer semestre de 2011 las indicaciones de su jefa, hasta el extremo de salir en su defensa ante algunos subordinados que plantearon una queja: "[el procedimiento] es orden directa ya no sólo de la dirección de Promoción [él mismo], sino de la mismísima presidenta". Y remata: "Estas órdenes siempre valen para algo, y no voy a tolerar que se cuestionen ni una vez más, con esta van dos veces". Cantos transmitió este mandato en uno de los varios correos electrónicos cuyo contenido contrasta con su denuncia de acoso laboral.

En e-mails remitidos a la propia Gómiz, el ex directivo elogia su gestión y la de Invercaria en general. Como respuesta, recibe de la ex presidenta y ex consejera delegada agradecimientos y felicitaciones por su trabajo.

Sus tareas como director de Promoción consistían en la captación de empresas y valoración inicial de cada proyecto de inversión. Y desde ese cargo participa en la puesta en marcha del tramitador informático Trewa, que comienza a desarrollarse con la puesta en marcha de una nueva línea de actuación, el Fondo de Capital Riesgo Jeremie. Este Trewa cobrará protagonismo en el ulterior enfrentamiento entre Cantos y Gómiez, pero Invercaria recuerda que "existen numerosos" correos electrónicos de Cantos en los que se pone de manifiesto la idoneidad de la herramienta para la gestión de la sociedad, y en los que no se formulan cuestiones de ilegalidad o falta de corrección técnica.

Invercaria también ha recordado que una vez que Cantos cambia de rumbo y decide enfrentarse a la dirección de la empresa, las deficiencias que señala en determinados proyectos coinciden con su trayectoria en el seno de la sociedad pública como responsable de la documentación, "por lo que está haciendo una crítica a su propio trabajo".

Esta circunstancia, sumada a lo que considera una evidente manipulación de las grabaciones de Cantos, lleva a Invercaria a reafirmarse en algo que ya dijo en público días atrás su actual presidente, Francisco Álvaro: el ex directivo, a la manera de un agente doble, ha sido el hombre encargado de una estrategia diseñada para colocar a Invercaria en el primer plano de la corrupción política, otro episodio que, sumado al escándalo de los ERE, golpea en la línea de flotación a la Administración socialista.